El arroz, los fideos, la harina, la ropa y el material escolar son los productos más solicitados debido a que sus precios son aproximadamente la mitad más bajos que en Argentina

Los ciudadanos argentinos muestran una preferencia notable por adquirir productos como azúcar, arroz, fideos y papel higiénico en territorio boliviano, especialmente en la frontera entre Salvador Mazza y Yacuiba. Esta tendencia se debe principalmente a los precios más bajos de estos productos en comparación con los ofrecidos en Argentina. La accesibilidad económica ha llevado a un aumento significativo de personas que cruzan la frontera para realizar sus compras.

 De acuerdo con Manuel Pieve, representante de la Cámara de Comercio de Pocitos Argentinos, la situación económica en Argentina ha generado una marcada inestabilidad del peso, escasez de dólares en el mercado, alta inflación y la implementación de nuevas políticas económicas por parte del actual gobierno. Estos factores han contribuido a una notable reducción del movimiento comercial, llegando incluso a disminuir hasta en un 50%.

 “Ha bajado muchísimo la compra de los productos en el lado argentino. Se está vendiendo la mitad de lo que vendíamos antes. Es mucho lo que ha disminuido en estos últimos meses, prácticamente el bajón se notó más después de fin de año”, aseguró Pieve. En diciembre de 2023, a los pocos días de asumir su mandato, el presidente Javier Milei devaluó el peso argentino en 50%, de 400 a 800 pesos por dólar.

 La situación económica ha llevado a un encarecimiento de los artículos de la canasta familiar para los ciudadanos argentinos. Como consecuencia, los precios en Bolivia se han vuelto atractivos para el bolsillo de las familias argentinas. Esta tendencia no se limita solo a los productos de consumo básico, sino que también se extiende a otros artículos para el hogar, como electrodomésticos y ropa de vestir.

Según Luciano Callahuara, dirigente de la Asociación de 10 de Febrero de San José de Pocitos, el negocio «está bien, no más». Afirmó que no se puede quejar, ya que ha experimentado un aumento del 30% en las ventas en los últimos meses. Su principal producto es la provisión de mochilas y maletas.

 “Ha bajado muchísimo la compra de los productos en el lado argentino. Se está vendiendo la mitad de lo que vendíamos antes. Es mucho lo que ha disminuido en estos últimos meses, prácticamente el bajón se notó más después de fin de año”

 “Para qué vamos a quejarnos si está mejorando. Ahorita la mayoría está llevando mochilas para el colegio; uniforme escolar, remeras, camisas, pantalones. Como las clases comienzan en marzo”, manifestó el dirigente que tiene su tienda sobre la Avenida Tarija, en pleno centro comercial de Pocitos.

 A pesar de no ser su rubro principal, Callahuara destacó que los ciudadanos del vecino país están adquiriendo arroz, azúcar y fideos, principalmente en almacenes ubicados en los pasos ilegales de la quebrada internacional. Estos establecimientos están estratégicamente posicionados para evitar que las personas tengan que cargar esos productos mientras realizan otras compras en la avenida principal de dicha población.

 Luis Cruz, un vendedor de alimentos en Salvador Mazza, ha afirmado tener conocidos que trasladan paquetes de arroz, azúcar y fideos más allá de la zona fronteriza. Aguaray o Tartagal, ubicadas a 23 y 52 kilómetros de la frontera, respectivamente, son las localidades donde los productos bolivianos están siendo demandados debido a su menor costo en comparación con los productos argentinos.

 Por ejemplo, el paquete de 10 kilos de arroz argentino tiene un costo de 12.000 pesos, lo que equivale a 86 bolivianos. En contraste, el arroz boliviano se vende en 7.000 pesos, equivalente a 50 bolivianos.

En el caso del azúcar, el paquete de 10 kilos tiene un costo de 9.500 pesos, es decir, 68,5 bolivianos. Mientras que el kilo de azúcar boliviana al por mayor resulta en menos de 5 bolivianos.

 Según Manuel Pieve, representante de la Cámara de Comercio de Pocitos Argentinos, el Gobierno Nacional debe agilizar la implementación de las nuevas políticas económicas para brindar certidumbre a los empresarios locales. Pieve señala que para finales de marzo, «deben estar las cosas claras».

 “En marzo inicia la cosecha de soja, que es uno de los pilares de la economía argentina. Para esos momentos, el gobierno va a tener que tomar algunas medidas; deberá tener solucionado todos los regímenes de exportación. Si no, no ingresará el dinero fresco que tanto necesita ahora”, aseveró.

 Actualmente, los grandes comercializadores que proveen los productos demandados por Bolivia operan bajo el sistema arancelario anterior al actual gobierno argentino. Esta situación les genera una falta de certidumbre suficiente para operar con comodidad. En los últimos meses, este panorama ha provocado el abandono del negocio por parte de una gran cantidad de comerciantes argentinos que habían abarrotado la población de Pocitos Argentinos, informó Pieve.

“Había una superpoblación del comercio; era muy brillante el negocio. Entonces todo el mundo había llegado, se instaló y alquiló locales. Ahora ya no es tanto. En este momento no conviene ir a instalarse en la frontera”.

Fuente: Radio Soberanía de Yacuiba 

Redacción: Publiagro