Con un enfoque integral que abarca genética, fisiología y manejo ambiental, expertos destacan nuevas tecnologías y prácticas para mejorar la eficiencia reproductiva
La mortalidad embrionaria en bovinos representa un problema significativo que afecta la eficiencia reproductiva y, por ende, la rentabilidad de las explotaciones ganaderas. Se estima que entre un 20% y un 40% de los embriones pueden perderse durante las primeras semanas de gestación, lo que implica una considerable pérdida económica y de recursos.
Este fenómeno es el resultado de una interacción compleja entre factores genéticos, fisiológicos, ambientales y de manejo. A continuación, se analizan los desafíos más comunes y las estrategias emergentes para abordar este problema de manera efectiva.
Factores genéticos
Los factores genéticos juegan un papel crucial en la viabilidad embrionaria. Se ha identificado que ciertas líneas genéticas son más propensas a la pérdida embrionaria debido a problemas como la incompatibilidad genética entre el embrión y el ambiente uterino, o defectos en la expresión de genes clave para el desarrollo temprano del embrión. Además, la consanguinidad puede aumentar el riesgo de mortalidad embrionaria al favorecer la expresión de alelos deletéreos recesivos.
«Hay que tratar de ver durante las primeras semanas el desarrollo de ese embrión que se formó, dónde ocurren las pérdidas, cuáles son los motivos que la pueden causar, de qué manera podemos reducir y minimizar ese tipo de pérdidas»
Problemas fisiológicos
Los desequilibrios hormonales, como niveles insuficientes de progesterona, pueden comprometer el ambiente uterino, dificultando la implantación del embrión y su desarrollo. Asimismo, trastornos metabólicos en la vaca, como la cetosis y la acidosis, pueden afectar la viabilidad del embrión, especialmente en las primeras etapas de la gestación. Estos problemas fisiológicos representan un desafío constante en la reducción de la mortalidad embrionaria.
Factores ambientales
El ambiente juega un papel fundamental en la incidencia de la mortalidad embrionaria. Omar Bellenda, doctor en reproducción y ecografía, y consultor privado, destaca que «el ambiente incide mucho, porque todo lo que tiene que ver con enfermedades que pueden estar contagiando o contrayendo los animales y causarles esas pérdidas tiene que ver con el ambiente».
Además, señala que «el alimento que están consumiendo no es suficiente, a veces el tipo de alimento, mucho influye el calor, por ejemplo, aumenta las pérdidas embrionarias».
Bellenda subraya la importancia de que los productores y ganaderos de la región del Beni conozcan dónde ocurren los bajos porcentajes de preñez.
«Hay que tratar de ver durante las primeras semanas el desarrollo de ese embrión que se formó, dónde ocurren las pérdidas, cuáles son los motivos que la pueden causar, de qué manera podemos reducir y minimizar ese tipo de pérdidas», explica.
Mejora en el uso de equipos de diagnóstico
El uso de tecnologías avanzadas como la ecografía es crucial para mejorar la tasa de éxito en la reproducción bovina. Según Bellenda, «nosotros hace muchos años ya trabajamos con la ecografía, que es algo que acá seguramente ya lo están utilizando para el diagnóstico de estación algunos colegas, pero la ecografía tiene mucho alcance en todo lo que tiene ver con la actividad ovárica, con el control de la gestación y las pérdidas tempranas de la reconfirmación de la viabilidad que tienen los embriones». Este tipo de tecnología, cuando se aplica en el tiempo y forma adecuados, puede proporcionar una valiosa información para la toma de decisiones en el manejo reproductivo.
Además, añade que, aunque hay algunas causas para las que «todavía no tenemos los elementos o las tecnologías necesarias», existen otras en las que «ya se utilizan tecnologías a nivel de uso de campo y otros aspectos que tienen que ver con la prevención, con el trabajo, con vacunas, con determinado tipo de productos que ayuden a disminuir ese tipo de pérdidas».
Perspectivas futuras en biotecnología y genética
La investigación en biotecnología y genética promete abrir nuevas vías para la reducción de la mortalidad embrionaria en bovinos. El uso de técnicas de edición genética, como CRISPR, podría permitir la corrección de defectos genéticos que predisponen a la pérdida embrionaria.
Además, la investigación sobre el microbioma uterino y su impacto en la salud embrionaria ofrece una nueva perspectiva para mejorar la viabilidad del embrión a través de la manipulación del entorno microbiano. Estas innovaciones podrían transformar radicalmente las estrategias de manejo reproductivo en los próximos años.
Conclusión
Reducir la mortalidad embrionaria en bovinos es un desafío multifacético que requiere un enfoque integral que abarque la genética, la fisiología, el manejo ambiental y las prácticas de reproducción asistida. La implementación de estrategias basadas en la evidencia científica y el monitoreo continuo de los resultados son esenciales para mejorar la eficiencia reproductiva y la rentabilidad en la producción bovina. Con el avance de la investigación y la adopción de tecnologías innovadoras, el futuro promete mejores resultados en la lucha contra la mortalidad embrionaria.
«Hay una cantidad de factores que lógicamente tenemos que tratar de buscar la manera de minimizarlo para lograr mejores resultados productivos», señala Bellenda.
Con un enfoque proactivo y el uso de las herramientas disponibles, es posible enfrentar los desafíos que presenta la mortalidad embrionaria y avanzar hacia una producción bovina más eficiente y sostenible.
Fuente: Omar Bellenda
Redacción: Publiagro