El tema de la climatización de galpones avícolas ha ganado relevancia en los últimos años debido a los efectos del cambio climático. Factores como el incremento de las temperaturas, la deforestación, el chaqueo y la falta de lluvias han creado condiciones desfavorables para la producción avícola. Frente a esta realidad, la implementación de galpones con ambientes controlados se presenta como una solución eficaz para mitigar los efectos negativos del clima y garantizar un entorno adecuado para las aves.
Roly Álvarez, gerente técnico de calidad en Insumos, enfatiza que, aunque existen productos y técnicas que ayudan a mitigar los impactos climáticos, la verdadera solución radica en contar con infraestructura que permita un control total del ambiente.
“Si nosotros hacemos un ambiente controlado con extractores y paneles evaporativos, las aves estarán en confort y podrán alcanzar un buen rendimiento en la producción de huevos”, afirma.
Beneficios de los galpones climatizados
Control de temperatura
Las gallinas son especialmente sensibles a las variaciones térmicas. Temperaturas superiores a 30 °C pueden provocar estrés por calor, reduciendo el consumo de alimento y la producción de huevos, e incluso aumentando la mortalidad. En contraste, temperaturas inferiores a 20 °C incrementan el consumo de alimentos para mantener la temperatura corporal, disminuyendo la eficiencia productiva. Un ambiente controlado asegura que las aves permanezcan dentro de su zona de confort térmico.
Humedad relativa
Un nivel de humedad inadecuado puede afectar la capacidad de las aves para enfriarse. Altos niveles de humedad también favorecen la proliferación de microorganismos y la formación de amoníaco, lo que impacta negativamente la salud respiratoria de las gallinas. Mantener una humedad relativa entre el 50 % y el 65 % es ideal para prevenir estos problemas.
«Si nosotros hacemos un ambiente controlado con extractores y paneles evaporativos, las aves estarán en confort y podrán alcanzar un buen rendimiento en la producción de huevos”
Calidad del aire
La acumulación de gases como el amoníaco y el dióxido de carbono, junto con el polvo, perjudica la salud respiratoria de las aves. Una ventilación adecuada en los galpones climatizados garantiza la renovación constante del aire, reduciendo la concentración de contaminantes y creando un entorno saludable.
Mantenimiento y control de galpones climatizados
Roly Álvarez subraya la importancia del mantenimiento constante de los sistemas de climatización para garantizar su eficacia.
“Si no hacemos mantenimiento a los paneles evaporativos y a los extractores, su vida útil se reducirá, disminuyendo su funcionamiento y obteniendo malos resultados”, explica. Además, el uso de controladores electrónicos digitales permite ajustar la temperatura de manera remota, adaptándose a las necesidades específicas de las aves según su edad y condiciones ambientales.
Sistemas de ventilación
Los sistemas de ventilación, naturales o forzados, son fundamentales para permitir la entrada de aire fresco y la salida de aire viciado. La ventilación de túnel, por ejemplo, es una solución eficiente para reducir el estrés por calor en climas cálidos.
Sistemas de enfriamiento
En regiones con altas temperaturas, se recomienda utilizar sistemas de enfriamiento evaporativo, como paneles húmedos o nebulizadores. Estos sistemas ayudan a disminuir la temperatura del aire mediante el aumento de su contenido de humedad.
Aislamiento térmico
Un buen aislamiento en techos y paredes contribuye a mantener una temperatura estable dentro del galpón, reduciendo la influencia de las condiciones climáticas externas y mejorando la eficiencia de los sistemas de climatización.
Rentabilidad y costos
Aunque la implementación de galpones climatizados representa una inversión considerable, Roly Álvarez destaca que los beneficios económicos a largo plazo son significativos.
“En los galpones que no son climatizados, las gallinas se estresan, producen menos huevos y tienen mayor mortalidad. Si tenemos 50 mil ponedoras y mueren 500, estamos perdiendo 500 huevos diarios. En cambio, con un buen ambiente, las gallinas no se estresan, no mueren, y la producción mejora significativamente”.
La climatización de galpones avícolas es una necesidad urgente en el contexto del cambio climático. Una infraestructura adecuada, combinada con un mantenimiento constante y el uso de tecnología avanzada, no solo garantiza el bienestar de las aves, sino que también optimiza la productividad y la rentabilidad de las granjas avícolas.
Fuente: Roly Álvarez
Redacción: Publiagro