Gerente de Ventas de Norvet destaca importancia del genotipo, fenotipo y ambiente en la crianza de ganado bovino para obtener animales de alta calidad y productividad

Al momento de planificar la implementación de un programa de mejoramiento genético, es fundamental considerar tres elementos básicos: el entorno, el sistema de producción y los objetivos de selección.

Jorge Landívar, gerente de ventas de Norvet, destacó que el propósito fundamental de las bases del mejoramiento genético bovino es alcanzar mejores resultados en la crianza y continuar mejorando la calidad del ganado bovino en el país.

Enfatizó los principios del mejoramiento genético, indicando que los productores deben realizar una selección cuidadosa del hato ganadero, eligiendo meticulosamente las matrices y los reproductores, teniendo en cuenta el mercado principal al que apuntan, en este caso, la carne y la leche.

Por lo tanto, es crucial que los productores establezcan las bases para cada una de las razas con las que trabajarán, ya sea mediante inseminación, transferencia de embriones, FIV, o cualquier otro método que permita avanzar en el mejoramiento genético de manera más rápida y eficiente.

Por ende, se refirió a las características que deben tener las razas de carne, tales como robustez, estructura muscular óptima, precocidad, costillas arqueadas y profundas, cuello corto y ancho, así como hipertrofia muscular, entre otros aspectos destacados.

En cuanto a los animales destinados a la producción de leche, señaló que se caracterizan por tener una estructura corporal angular y triangular, junto con una ubre de excelente calidad, lo que les permite ofrecer altas producciones diarias de leche.

“Prácticamente la producción es todo en la ganadería”, subrayó.

En este sentido, destacó que dentro de la producción se encuentran las ganancias económicas, la rentabilidad, los beneficios y el suministro alimenticio básico para la población.

Por lo tanto, señaló que la producción implica considerar el genotipo, fenotipo y ambiente. El genotipo de un animal representa el gen o grupo de genes responsables de un rasgo particular, o en un sentido más amplio, el conjunto total de genes heredados por un animal.

En contraste, el fenotipo es el conjunto de características observables o medibles de un organismo.

En cuanto al ambiente, es fundamental que los animales se adapten a la zona donde son criados para que puedan expresar todo su potencial productivo.

El profesional enfatizó que es crucial avanzar cada año en el mejoramiento genético para lograr animales con precocidad y alta calidad.

 

Fuente: Publiagro