La propiedad “Palacios”, produce la fruta hace aproximadamente 5 años y hasta el momento ha sido favorable

Propiedad “Palacios “ con plantas de guayabas / Foto : Publiagro

Publiagro llegó a la propiedad conocida como «Palacios», ubicada a 90 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz. En este establecimiento, se cultiva la guayaba tailandesa y otras variedades de frutas. La propiedad se extiende sobre 12 hectáreas y logra una impresionante productividad de 5 toneladas por semana. Además, en la localidad de San Juan de Yapacaní también se lleva a cabo la producción de esta deliciosa fruta.

Es relevante mencionar que, como respuesta a los desafíos causados por los bloqueos, esta finca también ha diversificado su actividad hacia el sector piscícola. Se ha implementado un innovador método de alimentación, en el cual los peces son nutridos con guayaba, junto con una dieta especializada diseñada para optimizar su crecimiento y salud.

Durante los últimos 5 años, Carlos Zabala Oliva ha estado inmerso en la producción de guayaba tailandesa junto a su familia. Fue la notable escasez de este fruto lo que captó su interés inicialmente. Motivados por esta observación, emprendieron una exhaustiva investigación de mercado, recolectando datos que revelaron la insatisfacción de ciertos sectores debido al limitado nivel de producción de guayaba.

 “Estamos copando mercados en La Paz, Cochabamba, Tarija, pero Santa Cruz es nuestro mayor mercado con la Guayaba”
Carlos Zabala, propietario y productor de guayaba tailandesa / Foto : Publiagro

“En estos tiempos no se encuentran plantas de guayabas en el patio de las casas”, dijo.

La mayor parte de la producción llegaba desde Sucre y en Santa Cruz, según Zabala, no se tenía un número considerable de productores, dedicados a la producción de guayaba.

Viajó a Brasil y Colombia, donde observó una considerable producción del fruto y adquirió conocimientos que luego aplicó en su propiedad.

Iniciaron sembrando una o dos hectáreas por hobby hasta que adquirieron un gusto particular por esta producción. Además, se dedican al cultivo de la soya en Pailón, entre otras actividades.

Sin embargo, en la actualidad, su enfoque principal se centra en la producción de guayabas tailandesas. Además, han diversificado su oferta al producir la fruta en forma de polvo y liofilizada con miras a la exportación, aunque aún no han podido concretar esta etapa debido a obstáculos burocráticos.

Destacó que el 80% de su producción está dedicada a los derivados de la guayaba, tales como mermelada, dulces, guayabada, mermeladas especiales para empresas, pulpas de guayaba, refresco, guayaba ácida, entre otros.

Es importante destacar que cuentan con su propia marca llamada «Alba Elena», la cual es propiedad de su hija Carla Zabala. Por otro lado, su hijo menor se encarga de la distribución del producto en la ciudad, supermercados y clientes bajo la marca «Frutali».

Subrayó que están proyectando establecer una planta procesadora en el campo. Esta idea surgió debido a que se han visto perjudicados por los bloqueos y han llegado al punto de quedarse con toda la producción de la fruta.

Ante esta situación, consideraron otra alternativa para agregar valor a la fruta que no puede salir del campo. Paralelamente a la producción de guayabas, se están dedicando a la piscicultura. Los peces están siendo alimentados con esta fruta que no ha sido vendida o que ya no está en condiciones de ser consumida. Asimismo, utilizan la fruta como abono orgánico.

Aunque para Zabala la piscicultura no es el punto más fuerte de la producción, están considerándola como una iniciativa para desarrollar otro negocio, con el apoyo de sus hermanos.

“Estamos copando mercados en La Paz, Cochabamba, Tarija, pero Santa Cruz es nuestro mayor mercado con la Guayaba”, aseveró.

Fuente: Publiagro