No cuentan con agua y alimento para el ganado, piden ayuda a las autoridades

El fenómeno del niño está ahogando a los productores del municipio de Cuevo, pues no cuentan con el vital líquido y tampoco tienen forraje para los animales. Actualmente se está provisionando agua para el consumo humano y aproximadamente un 90% de los atajados se encuentran sin agua.

Juan Carlos Ribera, presidente de la Asociación de ganaderos de Cuevo, indicó que los fenómenos climatológicos se están sintiendo con más intensidad, especialmente en este municipio.

El representante de los ganaderos agregó que fueron castigados el año pasado, pues no llovió lo suficiente, lo cual provocó la falta de forraje, tomando en cuenta que se provisionan para la época seca.

El registro pluvial que tienen en Cuevo es de 550 a 600 milímetros año, de precipitación normal y este año han registrado 280 milímetros y esta misma situación se viene dando hace dos años.

También la falta de precipitación ha generado que no haya el líquido elemento en los atajados, lugar donde los animales toman agua, sumado a que la cosecha de esta, no fue suficiente.

“El problema que tenemos es básicamente la falta de agua y forraje para los animales”, aseguró.

“Me atrevo a decir que más del 90% de los atajados que tenemos en los predios privados y comunales se encuentran secos”

Mencionó que desde el mes de mayo los atajados y quebradas se han secado y actualmente los pobladores se están provisionando del vital líquido de la red de agua.

En Cuevo se provisionan de agua a través de atajados o represas, donde acumulan agua de lluvia, lo cual les permite el consumo de ésta para los animales.

Sin embargo, Ribera, dice que los meses que vienen son días muy duros, pues aseveró que han agotado todos los recursos que tienen para poder combatir la cruda realidad que viven en Cuevo.

El alimento para el ganado ya se está transportando de otras zonas y esto va repercutir más adelante, cuando el ganado sufra por la falta de alimento, pues cuentan con 11 mil cabezas y se tiene una afectación de un buen porcentaje.

“Me atrevo a decir que más del 90% de los atajados que tenemos en los predios privados y comunales se encuentran secos”, afirmó.

Al margen de los atajados también disponían de vertientes naturales, quebradas y manantiales, actualmente éstas se encuentran sin agua.

En estos momentos los productores acarrean el vital líquido en lo que pueden, como cisternas lo cual le resulta un costo elevado para el pequeño productor.

Un animal consume entre 50 y 80 litros de agua al día y en este caso los que tienen medidor para el consumo humano, les genera un costo elevado.

De igual manera en cuanto alimento para el ganado, el productor lleva de donde puede, pues no tienen ensilaje y el monte está seco sin pasto.

Fuente: Publiagro