El sector lechero de Bolivia enfrenta un momento crítico debido al incremento de los costos de producción, lo que amenaza la rentabilidad de los productores y podría generar un desabastecimiento en el mercado. Eduardo Sirbián, presidente de la Federación de Lecheros de Santa Cruz (FEDEPLE), advirtió sobre la necesidad urgente de modificar la resolución biministerial para contrarrestar el impacto de estas alzas.
“En lo que quedamos el año pasado ha quedado corto. Los costos de producción van subiendo y un claro ejemplo es la subida de golpe del maíz, el sorgo y la harina de soya, que se ha incrementado en 128 dólares más por quintal. Eso es un golpe para el productor que solo quiere producir”, manifestó Sirbián.
La situación afecta tanto a los lecheros de Santa Cruz como a los de Cochabamba, quienes coinciden en que la falta de medidas para mitigar el aumento de costos pone en riesgo la producción lechera del país. De no tomarse acciones inmediatas, advierten que podría haber escasez del producto y un incremento en los precios al consumidor final.
En Cochabamba, los productores han declarado estado de emergencia debido al encarecimiento de insumos esenciales, en especial los utilizados para la elaboración de alimentos balanceados. Mario Mercado, productor y representante del sector en la región, detalló que uno de los insumos más golpeados es la harina de soya solvente, cuyo precio ha aumentado en 1.000 bolivianos por tonelada en los últimos meses.
“Tenemos que recurrir al mercado paralelo y eso implica comprar tres veces más caro. Estamos muy preocupados por la situación, ya que no estamos siendo abastecidos. También la mano de obra ha subido y la escasez de diésel nos ha jugado en contra”, expresó Mercado.
“En lo que quedamos el año pasado ha quedado corto. Los costos de producción van subiendo y un claro ejemplo es la subida de golpe del maíz, el sorgo y la harina de soya, que se ha incrementado en 128 dólares más por quintal. Eso es un golpe para el productor que solo quiere producir”
Otro insumo fundamental, la cascarilla de soya, presenta una oferta limitada, lo que obliga a los productores a buscar alternativas más costosas para mantener la producción.
Ante este complejo escenario, los lecheros advierten que el precio de la leche cruda podría incrementarse en 1,45 bolivianos por litro debido a los costos de producción en ascenso. Actualmente, los productores venden el litro de leche cruda a Pil Andina por 3,55 bolivianos, pero con los nuevos costos, demandan que el precio sea ajustado a 5 bolivianos.
“Con bonos de calidad tendremos la oportunidad, haciendo un trabajo que es propio del sector lechero, de llegar a 3,80 o hasta 3,90 bolivianos haciendo un esfuerzo. Pero también tenemos el precio de la leche de exportación, ahí tenemos una falencia porque en Bolivia se sigue cotizando en 2,71 bolivianos, menos incluso dependiendo de la fórmula”, detalló Mercado.
El incremento en los costos de insumos es alarmante. Según los productores, una bolsa de 46 kilos, que antes costaba 100 bolivianos, ahora se vende en 160 bolivianos, lo que hace cada vez más difícil sostener la producción lechera en el país. Frente a este panorama, el sector lechero exige soluciones inmediatas que permitan garantizar la sostenibilidad de la producción y la seguridad alimentaria de Bolivia.
Fuente: Eduardo Sirbián y Mario Mercado
Redacción: Publiagro
