Los Llanos de Moxos, ubicados en el departamento del Beni, conforman una vasta llanura tropical caracterizada por humedales, sabanas y bosques. Este ecosistema no solo es de gran importancia ecológica, sino que también representa un espacio clave para el desarrollo de la ganadería sostenible, la conservación de la biodiversidad y la implementación de prácticas de manejo adaptadas a su entorno.
Marlene Barral Quintana, coordinadora del programa de ganadería sostenible, señala que los ganaderos en la región enfrentan dos estaciones marcadas: la sequía y las inundaciones. Ante estos desafíos climáticos, han adoptado estrategias que les permiten garantizar la productividad y el bienestar del ganado a lo largo del año.
El enfoque de la ganadería sostenible no es un concepto nuevo en la región. Existen estancias ganaderas que ya han implementado este modelo con mejoras significativas, comenzando desde la infraestructura básica. Entre los cambios aplicados se encuentran:
- Corrales adecuados sin esquinas, con iluminación para el trabajo nocturno.
Suministro de agua limpia en potreros, asegurando cantidades necesarias mediante bombas solares. - Rotación de potreros utilizando alambres eléctricos móviles.
- Uso intensivo de pasturas de bajíos para aprovechar mejor las condiciones del terreno.
- Manejo de islas y regeneración forestal, cerrando el 50% de las islas para su recuperación y conservando bosques en galería para proteger al ganado durante los períodos de frío invernal.
- Mejoramiento genético en el hato ganadero, acompañado de un enfoque en bienestar y sanidad animal.
- Implementación de buenas prácticas ganaderas, incluyendo pastoreo rotativo y monta controlada dos veces al año.
«No se puede pensar en un modelo de ganadería sostenible si tuviera un enfoque tan solo de conservación, porque al final de la cadena se tiene que ver la rentabilidad de todas las acciones que se están aplicando dentro del manejo productivo»
Modelo de Ganadería Sostenible
El modelo de ganadería sostenible se basa en cuatro pilares fundamentales:
- Pilar ambiental: La producción debe realizarse en armonía con los recursos naturales.
- Pilar social: Se deben aplicar principios de equidad, solidaridad y seguridad social.
- Pilar económico: La ganadería debe ser rentable para permitir a las personas llevar una vida digna.
- Pilar de gobernanza: Es fundamental valorar el marco legal, la institucionalidad y la participación en organismos sectoriales.
¿Qué implica la ganadería sostenible y hacia dónde vamos?
La ganadería sostenible en los Llanos de Moxos se basa en la preservación de los pastizales naturales, asegurando su viabilidad social, económica, ambiental y de gobernanza. Para evaluar el impacto de este modelo, se utilizan indicadores de sostenibilidad que permiten medir su efectividad y diferenciar la carne producida bajo sistemas de manejo responsable.
En este sentido, el reconocimiento del productor certificado es clave, ya que garantiza que la carne proviene de sistemas de producción sostenible.
«No se puede pensar en un modelo de ganadería sostenible si tuviera un enfoque tan solo de conservación, porque al final de la cadena se tiene que ver la rentabilidad de todas las acciones que se están aplicando dentro del manejo productivo».
Próximos pasos
Como parte de los avances hacia una ganadería sostenible, la Alianza Eco-Ganadera ha definido una serie de pasos estratégicos:
- Formalización de la organización, estableciendo estatutos y reglamentos internos para consolidar sus bases legales y operativas.
- Registro legal de la Alianza Eco-Ganadera Beni ante las instancias correspondientes para su reconocimiento oficial.
- Desarrollo de herramientas para la evaluación de sostenibilidad y certificación del modelo de ganadería sostenible.
- Acceso a financiamiento, facilitando la transición hacia prácticas ganaderas sostenibles mediante recursos e incentivos económicos.
La consolidación de la ganadería sostenible en los Llanos de Moxos representa una oportunidad clave para equilibrar la conservación ambiental con la productividad ganadera, asegurando un futuro sustentable para los productores de la región.
Fuente: Marlene Barral Quintana
Redacción: Publiagro
