La campaña de verano ha finalizado con un 97% del área proyectada sembrada, lo que equivale a aproximadamente 1.200.000 hectáreas. Sin embargo, algunas zonas no pudieron ser cultivadas debido al exceso de lluvias. A pesar de ello, este fenómeno podría resultar beneficioso, ya que garantizaría una buena humedad para la próxima siembra de invierno.
Fernando Romero, presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO), destacó el esfuerzo del sector productivo para seguir adelante pese a los desafíos que enfrentan, como las condiciones climáticas adversas y la escasez de diésel.
«La siembra de la campaña de verano ha alcanzado un avance del 97%. Definitivamente, cada hectárea está siendo trabajada con todo el riesgo que ello implica. El productor sigue poniéndole el hombro al país, arriesgando su capital, refinanciándose y, de alguna manera, apoyando la producción nacional», señaló Romero.
«La siembra de la campaña de verano ha alcanzado un avance del 97%. Definitivamente, cada hectárea está siendo trabajada con todo el riesgo que ello implica. El productor sigue poniéndole el hombro al país, arriesgando su capital, refinanciándose y, de alguna manera, apoyando la producción nacional»
El esfuerzo realizado por los productores ha sido clave para garantizar la provisión de alimentos esenciales en cadenas productivas como la avícola, porcina, lechera y cárnica, sectores que demandan un mayor suministro de insumos.
De acuerdo con las proyecciones, la cosecha de verano podría arrojar buenos rendimientos. En el caso de la soya, se espera superar la producción de 440.000 toneladas obtenidas en la campaña del 2024.
Fuente: Fernando Romero
Redacción: Publiagro
