La quema del bagazo (residuo de la caña de azúcar) tiene un alto costo, tanto social como económico, incide desfavorablemente en lo ambiental, en la salud de las personas y ocasiona riesgos de cortes en el suministro eléctrico y daños en las infraestructuras.
Para reducir esta práctica, y a solicitud del Gobierno Municipal de Bermejo, la Cooperación argentina y española vienen capacitando a productores de caña y trabajadores de Industrias Agrícolas de Bermejo (IABSA) con un importante programa especializado.
En efecto, recientemente en la ciudad de Tucumán, República Argentina, se ejecutó la octava etapa del Proyecto de Cooperación “Plan de aprovechamiento de residuos agrícolas de la caña de azúcar”, cuyo objetivo apunta a reducir la quema del bagazo, mitigando sus efectos adversos para el medio ambiente y la salud, aprovechando económicamente de mejor manera este tipo de residuos.
En esta actividad participaron representantes del Municipio de Bermejo, productores independientes de caña de azúcar y funcionarios del ingenio azucarero IABSA (uno de los más importantes del país que emplea a más de 10.000 personas de manera directa e indirecta).
Durante la misión se conoció la experiencia de la “Mesa de gestión ambiental de Cruz Alta”, organización social que lleva nueve años de experiencia en el manejo de la problemática de la quema de caña de azúcar y actualmente trabaja en tres grandes dimensiones: técnico-productiva, socio cultural y legislativa.
De igual forma se presentó la experiencia tucumana de Certificación de Normas de Buenas Prácticas Agrícolas “Caña de azúcar sin uso del fuego”. También se analizó el trabajo realizado en escuelas para el establecimiento del “Plan de mediación pedagógica para la prevención de las quemas”, y se visitaron dos ingenios en los que se pudo apreciar el enfoque empresarial utilizado para la producción sin quema, y los procesos y beneficios para las comunidades locales.
Finalmente, en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), de la localidad de Famaillá, se presentó el “Programa caña de azúcar” y un estudio sobre los cambios tecnológicos de los pequeños productores cañeros en Tucumán.
Esta iniciativa, financiada por el Fondo Argentino de Cooperación Internacional (FO.AR) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), así como todas las que se implementan en Bolivia, tiene por objeto el intercambio de conocimiento, experiencias y buenas prácticas a fin de fortalecer las capacidades instaladas en el país.
Fuente: Periódico El País Tarija