El caso de las Londras que el pasado mes de octubre de 2021 causó conmoción vuelve a ser noticia cuando un grupo de entre 300 a 400 personas volvieron a agredir a los pobladores en la zona llamada Pailitas y en las Londras de donde se niegan a abandonar los terrenos invadidos.
El accionar de los llamados interculturales fue idéntico al que realizaron en octubre del pasado año en el cual secuestraron, y maltrataron a trabajadores, policías y periodistas.
Una nota de prensa del noticiero Telepaís de Unitel muestra la magnitud del problema que nuevamente ha generado un grupo de personas armadas con rifles, escopetas y machetes, los cuales buscan a toda costa desalojar a quienes son agricultores y se encuentran en esa región desde hace muchos años.
Una de las víctimas comentó en el video publicado en el referido medio televisivo que lo mantuvieron durante dos días secuestrado junto a varios miembros de su familia por personas encapuchadas que lo amenazaban de muerte para que les respondiera aspectos que sabía que decir.
«Llegaron en motos y a todos nos amenazaron. Me secuestraron, me golpearon y me preguntaban si era de la comunidad o era un espía ventero de la empresa», recalca uno de los comunarios afectados.
Comentó que los encapuchados le señalaban que si no respondía las preguntas lo iban a asesinar junto a su familia, a lo cual les señalaba que no conocía nada de lo que le interrogaban.
El predio se encuentra ahora tomado por los invasores, aunque bajo el resguardo policial para evitar desórdenes públicos como los suscitados el anterior sábado, en el que se enfrentaron con los policías que llegaron al sitio.
Las personas que fueron sacadas de las Londras fueron trasladadas a un sitio distante a una media hora, mientras que los presuntos invasores se niegan a salir del sitio y están resguardados por un pequeño contingente de gendarmes.
Afectados claman por ayuda
Los desalojados solicitan ayuda para retornar a sus comunidades en las Londras y Pailitas tras haber pasado cinco días en los que los obligaron a salir de la zona.
Simeón Chuviru, uno de los afectados, manifiesta su descontento por haber sido expulsado junto a su familia y numerosos vecinos por los interculturales.
«Por favor, hagan algo por nosotros. Estamos durmiendo a la intemperie, enfermos y haciendo un poco de comidita. Estamos mal y por ello pedimos ayuda a las autoridades para volver a nuestros predios», aseveró la señora María Saavedra, desconsolada por el difícil momento que atraviesa junto a su familia.
Interculturales piden que se vaya la policía
Por otra parte, se conoció a través de los medios que los presuntos avasalladores manifiestan pertenecer a la Federación Especial de Comunidades Interculturales de productores Agropecuarios de San Julián Norte y solicitan al Gobierno central retirar al contingente policial de la zona.
Los agentes se encuentran en la zona, pero solo se limitan a realizar una vigilia, en virtud a que no exigen a los interculturales que se vayan de los terrenos invadidos.
Se sienten amenazados y por ende califican de abuso las acciones y exigen además la inmediata libertad de Nelson Rivadeneira Escalante, preso desde hace 180 días.
Fuente:Unitel
Redaccion Publiagro
