Se estima una merma de casi 90.000 hectáreas (ha) en relación al ciclo pasado, debido en gran parte a la sequía, es decir que el área sembrada con soya de primera alcanzaría unas 500.000 ha.
La condición del cultivo de soya en las provincias de Argentina fue catalogada de la siguiente manera: Muy buena 15 %, Buena 53 %, Regular 27 % y Mala 5 %. No obstante, un reporte de la Bolsa de Cereales de la provincia de Entre Ríos resalta una merma de 90 mil hectáreas en relación a la temporada pasada.
«La condición del cultivo se ha mantenido estable desde la última evaluación, pero el retroceso de las reservas impacta negativamente en la soya, en la que se observa aborto de vainas y pérdidas de hojas en el tercio inferior de la planta, síntomas que marcan la necesidad de precipitaciones», indica el reporte.
Plagas como orugas, chinches, trips y arañuelas, con fuerte presión de las últimas dos mencionadas, asociadas a la sequía se han presentado para frenar el avance del cultivo soyero.
Con claros síntomas de estrés el estado general del cultivo de soya de segunda (cuya área total es cercana a las 550.000 ha) es inferior a la de primera, señaló el Sistema de Información Agrícola (Siber). En cuanto a la fenología, la oleaginosa se ubica desde floración a formación de vaina.
El Siber detectó una caída del 7 % tanto en las categorías muy buena + buena como en la regular + mala con respecto a la anterior evaluación (10/02/2022),
«Es imprescindible la ocurrencia de precipitaciones de importantes para que cultivo continúe su desarrollo de manera favorable», sostuvo el informe, al igual que en el cultivo de soya de primera, hay presión leve de insectos, que en ocasiones demanda la realización de controles.
Fuente: Agri Total
Redacción: Publiagro
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