Sector avícola pegó su grito de alarma porque no les venden la harina de soya

0
3471

El presidente de ADA Santa Cruz, Ricardo Alandia, sostiene que están al borde de una crisis productiva por cuanto las empresas aceiteras se niegan a venderles el insumo alegando que el Gobierno no les ha entregado los cupos. Indicó que se puede producir un desabastecimiento de carne de pollo si las autoridades no actúan rápido.

El sector avícola nacional está al borde de una crisis productiva, motivado a que no están siendo abastecidos de un insumo vital como lo es la harina de soya solvente, según denunció en una conferencia de prensa, Ricardo Alandia, presidente de la Asociación de Avicultores de Santa Cruz (ADA).

A través de un manifiesto público los avicultores formularon la denuncia referida básicamente a la falta de la harina de soya solvente que se utiliza para la crianza de las aves por lo que el sector se manifiesta en estado de alerta.

Destacan que la industria aceitera no acata la Resolución gubernamental que los obliga a vender el insumo, negándose a atender las solicitudes de compra y utilizan como excusa que el Gobierno aún no les ha emitido la lista de asignaciones de cupos correspondientes.

En cuanto al precio de la soya informaron que hasta la semana pasada era de 2.700 bolivianos por tonelada y el precio que sacó la Resolución Bi ministerial está alrededor de 2.000 bolivianos por Tn, sin embargo, al no hacerse efectiva la medida los productores continúan pagando 700 bolivianos más por tonelada cuando se la venden.

Los dirigentes avícolas señalaron que hasta el 4 de enero las empresas aceiteras no les habían vendido ni un grano de soya ni al precio anterior y menos al que fue acordado en la Resolución.

«Tenemos conocimiento de que los aceiteros han apelado la nueva normativa, mientras tanto los productores nos encontramos de brazos cruzados por la falta de insumos y corremos el riesgo del desabastecimiento, por cuanto los animales no paran de comer todos los días», sostuvo el dirigente.

Ratificaron que el nuevo precio acordado está vigente a partir del primero de enero y ya están a 5 y no tienen ni abastecimiento ni la solución definitiva al problema.

«La Resolución Bi ministerial ya está en vigencia, pero ni nosotros, que somos los representantes del sector avícola la hemos recibido en forma oficial. La hemos obtenido por otras fuentes.

Consideran que es una falta total de seriedad esta situación y estiman que están jugando con la seguridad alimentaria de los bolivianos,

Se han comunicado con representantes del Gobierno Nacional para formularles el reclamo y la situación difícil que atraviesan, especialmente por el riesgo que están corriendo los productores.

Los avicultores manifiestan, asimismo, que ellos sabían lo relativo a los cupos que les colocan, pero al mismo tiempo consideran irrisorio que les impongan esas medidas sobre un producto que como la harina de soya exporta el 70% de su producción.  

«Si los cupos no llegan a la industria, ellos tienen ese argumento para no vendernos la harina de soya», aseguró en forma tajante.

Señaló que la situación del sector que representa es realmente critica ya que no es solo la elevación de insumos de la soya, también se ha elevado el maíz y el sorgo. Por ello solicitó coherencia a las autoridades.

 

Fuente: INTA/ARGENTINA

En la figura 2 se señala el potencial de consumo de agua por las distintas categorías de bovinos. Es importante apuntar que los animales de mayor producción, principalmente las vacas de cría y las lecheras son las que tienen un gran consumo de agua, aspecto que debe ser tomado en cuenta en toda planificación de un sistema de producción. Las distintas categorías de producción requieren, por seguridad, una fuente de agua de calidad.

Composición química del agua

La composición química del agua puede variar mucho. Cuanto peor es la calidad, más bajo es el consumo, lo que limita o baja la ganancia de los animales. De igual manera, según el aporte de minerales que viene del agua y del forraje, el consumo puede cambiar mucho.

Los valores expresados en la concentración del agua pueden ser de la siguiente manera:

  1. g/litro de agua = 10.000 mg/l = 10.000 ppm = 1%.

Sales totales disueltas (STD)

Estas sales forman parte de un grupo químico complejo. Son distintas partículas inorgánicas que permanecen después de la evaporación del agua. Conocido como Solidos totales, sus niveles en el agua determinan las respuestas productivas de los animales, consumo de agua, consumo de alimento y cómo debemos hacer la suplementación mineral a los animales.

Los niveles de concentración de STD en el agua y su potencial de producción (esos valores se encuentran en el análisis químico del agua).

  • Agua con hasta 2,0 g/l de STD – Fuentes de agua con esa concentración de STD requiere una buena suplementación mineral para todas las categorías, principalmente vacas de cría. Son conocidas como aguas poco engordadoras.
  • Agua con 2,00 a 5,00 g/l de STD – Son niveles de STD adecuados a una buena producción ganadera, mirando los niveles de sulfatos disueltos, que puede afectar de manera negativa el consumo de agua y alimento. El agua que se encuentra en esa categoría es muy indicada para una buena producción de leche y carne.
  • Agua en ácima de 5,00 g/l de STD – Son niveles que pueden reducir el consumo de agua. Hay algunas categorías de animales que toleran eses niveles mayores de STD, pero con reducción en la producción. En Engorda y Lechería no es indicada su fornecimiento.

Sulfatos

Los sulfatos de magnesio o sodio provocan efectos adversos en la producción de carne o leche, como diarreas. Tienen un sabor amargo que restringe el consumo, principalmente en animales no adaptados o categorías más sensibles como los terneros de carne o leche.

Está comprobado por algunos estudios que los niveles de sulfatos de 500 mg/l provocan efectos adversos a la absorción de cobre. También hay efectos, aunque variable, en la absorción de calcio, magnesio y fosforo. En confinamiento niveles de 800 mg/l de sulfato en el agua de bebida provocan diminución en la ganancia de peso, haciendo con que los animales dejen de ganar 300 gramos de peso por día en relación a grupos con acceso a agua con niveles de 400 mg/l de sulfato. Niveles elevados de sulfato de magnesio, calcio y sodio, requieren mayores aportes de cobre en las dietas.

Hay categorías de bovinos adaptados a niveles de hasta 4.000 mg/l de sulfato, pero con limitaciones en la producción de carne y leche, sin explotar el máximo de capacidad productiva de los animales.

Algunos estudios presentan que niveles de sulfato de sodio de 1000 mg/l pueden mejorar la digestión de la fibra y el consumo de alimentos. Niveles mayores de 2000 mg/l de sulfato de sodio pueden tener efectos adversos para el consumo de los animales.

Tenemos algunas zonas de Bolivia con aguas ricas en sulfatos. En esos casos lo mejor que podemos hacer es un análisis químico del agua para ajustar la mejor suplementación mineral, sistema de producción y categorías que mejor se adaptan o no a agua ofertada.

Cloruros

Los cloruros son en gran parte de sodio, magnesio, calcio y potasio. Los niveles en agua subterráneas, difícilmente superen los 3 g/l, con excepción de algunas zonas del país donde existen capas salinas a diferentes profundidades, que condicionan la calidad de las aguas subterráneas.

El cloruro de sodio es una sal beneficiosa que confiere sabor salado a agua. Esa fuente de agua rica en cloruro de sodio, 2 g/l, soin aguas de buena calidad para la producción ganadera, siempre y cuando, los sulfatos no estén en exceso. El cloruro de sodio (sal común) con niveles adecuados (±2 g/l) y bajos de sulfatos (<1 g/l) es beneficioso, no superando los 8 g/l, que provoca efectos adversos en animales de producción y reproducción (vacas de cría).

En los casos de los cloruros de calcio y de magnesio, le dan gusto amargo y provocan diarrea en los animales, necesitando un cuidado mayor con ese tema.

Carbonatos y Bicarbonatos

Estas sales son las que provocan la dureza del agua. El ion de calcio y magnesio forman complejos en agua con carbonatos de calcio (CaCO3).

No hay efectos deletéreos sobre a producción de los animales. Ocurre que la asociación de Ca y Mg forma dureza del agua, provocando incrustaciones en la cañería por eso es importante estar atentos a las fugas en la cañería cuando tenemos esa calidad de agua.

Alcalinidad Total (mg/l de CaCO3)

La alcalinidad del agua es su capacidad en neutralizar ácidos. Niveles de Alcalinidad mayores 500 mg/l pueden provocar diarrea. Cuando la alcalinidad aumenta disminuye el nivel de sulfato.

Potasio: No hay efectos dañinos para la producción ganadera por los niveles pequeños en agua.

Calcio: No existe límites de toxicidad, solo garantiza la dureza del agua.

Magnesio: Es un macromineral muy importante para la producción ganadera. Su nivel en el agua puede garantizar una buena producción y reproducción. En algunas aguas subterráneas se pueden encontrar en exceso o asociados a sales de sulfato, aportando sabor amargo a agua.

Valores máximos tolerables:

  • Vacas lecheras – 250m mg/l
  • Terneros destetados – 400 mg/l
  • Bovinos adultos – 500 mg/l

Importante remarcar que el nivel arriba depende de las concentraciones máximas de arsenio (0,2 g/l) y fluor (1,0 g/l) en el agua, que pueden ser no aptas para cualquier tipo de consumo animal, considerándose un agua toxica.

pH del agua

El pH del agua para bebida que toman los animales puede variar de 6 a 8. El agua ligeramente alcalina (pH 7 a 7,3) es la mejor para producción animal. Las que excedan aquellos límites hacia abajo (pH menos de 5) o hacia arriba (pH más de 8) tienen efectos corrosivos sobre instalaciones y efectos adversos en la digestión de los rumiantes.

Componentes del agua y sus niveles de seguridad

Figura 3: Concentración de los componentes del agua que afectan en el rendimiento del ganado

 

Componente Rendimiento reducido Inaceptable para el ganado
Nitratos (ppm) 450-1.300 > 1.300
Salinidad/STD (ppm) 3.000-7.000 > 7.000
Sulfatos (ppm) 500-3.300 > 3.300
Coliformes fecales (UFC/100ml) 1.000-2.500 > 5.000
pH > 8,5 > 10

 

Sabor y olor del agua de bebida

El ganado muestra preferencia por beber de una fuente de agua limpia. Las buenas prácticas en el mantenimiento de las instalaciones de agua, como mantener los canales aseados y las vías de agua con hierba, impedir el acceso del ganado a las corrientes de agua y la aireación del agua de los pozos, son modos baratos de disminuir el gusto y el olor, así como la manera de asegurar una buena calidad de agua.

El tratamiento para eliminar el sabor y el olor es muy caro, pero su prevención es sencilla. Los excrementos en el agua proporcionan sabor y olor.

Bacterias, virus y parásitos

Hay una larga variedad de ellos que pueden producir enfermedades o pérdidas en la producción y son agentes comunes en aguas procedentes de atajados, pozos y reservorios que colectan aguas residuales, o a las que el ganado tiene acceso. El agua contaminada puede diseminar una determinada enfermedad de forma muy rápida en toda tropa.

Las recomendaciones básicas para los máximos niveles de coliformes varían desde 10 (para terneros) a 5.000 (para adultos) UFC (unidades formadoras de colonia) por 100 ml. Las muestras tomadas del agua estancada pueden alcanzar hasta 15.000 UFC/ml. 

El agua contaminada con heces puede transmitir muchas enfermedades, debido a agentes como Ecoli, Cryptosporidium, Salmonella y Leptospira. Estos microorganismos afectan a los animales más jóvenes y tienen menos importancia en los adultos. Una enfermedad que sí afecta a los animales adultos es la leptosporidiosis, que puede diseminarse mediante el agua contaminada y que produce una mayor tasa de abortos, que normalmente tienen lugar de 2 a 5 semanas después de la infección.

El ganado puede hacerse resistente a estos agentes, pero la introducción de un nuevo patógeno que no sea común puede diseminarse rápidamente y causar enfermedad, especialmente en los más jóvenes. Los terneros tienen la inmunidad pasiva procedente de sus madres, pero son muy susceptibles a una alta dosis de patógenos.

El método más sencillo para minimizar los patógenos en agua es prevenir su entrada desde fuentes fecales y evitar la entrada directa de los animales a los cursos de agua. Los rayos ultravioletas del sol son efectivos para la eliminación de patógenos en aguas que estén relativamente claras. Permitir que los animales estén en contacto directo con el agua puede levantar partículas, enturbiarla e impedir que estos rayos destruyan los patógenos del agua.

Fuente: Totalpec