Época larga de sequía, altas temperaturas y escasa humedad son detonante para la multiplicación del insecto

Los productores de hortalizas en Los Negros enfrentan dificultades debido a la falta de precipitación constante. Cuando llueve de manera continua, la lluvia combate a los insectos y reduce la propagación de enfermedades, lo que protege los cultivos. Sin embargo, cuando las precipitaciones son ocasionales, puede acelerar la multiplicación de la mosca blanca, lo que representa un desafío adicional para los agricultores.

Por ende, el aumento en el costo de la producción se debe a la aplicación de productos químicos y bioinsumos para controlar la proliferación de la mosca blanca y otras plagas. Además, estas condiciones climáticas irregulares provocan pérdidas considerables en los cultivos.

Ademar Álvarez, productor de hortalizas en Los Negros, indicó que en esta localidad están siendo atacados por la mosca blanca, un pequeño insecto chupador que puede causar grandes daños en los cultivos al extraer alimento de la planta y transmitir enfermedades.

Agregó que la plaga tiene un comportamiento acorde a la temperatura, humedad y precipitaciones. Por ejemplo, la ola de calor que se siente en el departamento de Santa Cruz ha provocado una conducta anormal en estas plagas.

“La mosca blanca se ha expandido en su población, como nunca se ha visto el ataque del insecto, esto a consecuencia de la época larga de sequía “, afirmó.

“La mosca blanca se ha expandido en su población, como nunca se ha visto el ataque del insecto, esto a consecuencia de la época larga de sequía “

El productor de hortalizas indica que esta invasión aún continúa y están controlando el insecto con agroquímicos, así como con bioinsumos, productos de origen natural y biológicos.

Esta plaga es considerada propia de la época seca, especialmente a finales de invierno, durante toda la primavera y el otoño, períodos en los cuales aumenta su población. Debido a la falta de precipitaciones, la mosca blanca continúa atacando con fuerza a los cultivos de hortalizas.

En estos momentos, el ataque de la mosca blanca afecta a todos los cultivos de hortalizas, incluyendo achojcha, tomate, vainita, zanahoria, perejil, coliflor, espinaca y otros. La plaga representa una amenaza significativa para la producción agrícola en la región.

Dijo preocupado que no esperaban el nivel de ataque de la mosca blanca en sus cultivos de hortalizas y mucho menos en esta época. Específicamente, la invasión inició a finales de la campaña de invierno del 2023 y persiste hasta estos momentos. 

Recalcó que anteriormente no consideraban que fuera de mucha importancia, ya que generalmente las condiciones climáticas no eran favorables para la multiplicación de la mosca blanca y no se veía la necesidad de utilizar insecticidas para combatirla. Sin embargo, en esta ocasión, se ha visto todo lo contrario, con una proliferación inesperada y un impacto significativo en los cultivos de hortalizas.

Intranquilo, Álvarez reveló que el problema radica en que la temporada prolongada de calor, sequía y escasa humedad ha sido un detonante para que la mosca blanca se prolifere en cantidades desmesuradas.

Fuente: Publiagro