Uno de ellos era el administrador de las propiedades donde ocurrió el abigeato y el otro se encargaba de seleccionar a los animales

El Tribunal 11avo. de Sentencia del Distrito Judicial de Santa Cruz dictó una sentencia histórica en el caso Nurej 701199201254738 contra los acusados por abigeato Juan Marcelo Salvatierra Rojas (condenado a 5 años y cuatro meses de prisión) y Darko Kanez Araya (tres años y dos meses de cárcel) respectivamente.

El abogado de la víctima, Jorge Pérez Valenzuela, calificó esta decisión judicial como trascendental porque después de 11 años del proceso penal se aplicó un castigo a los implicados.

Además enfatizó que se trata del caso de robo de ganado más grande que se ha conocido en Santa Cruz, porque se sustrajeron más de 1.520 cabezas de la raza Nelore en la zona de Pailón.

“El daño económico hasta el 2012 fue de aproximadamente 10 millones y medio de bolivianos, si le aplicamos el lucro cesante hasta la fecha sería una cifra altísima”, dijo Pérez.

“Pese a que la sentencia es histórica apelaremos la resolución del tribunal, porque se trata de un abigeato agravado y el castigo es muy leve”
Jorge Pérez Valenzuela, abogado de la víctima de abigeato

Apelación

El tribunal dio 15 días de plazo para que las partes involucradas en este hecho puedan apelar, la parte demandante anticipó que hará uso de esa opción legal.

“Pese a que la sentencia es histórica apelaremos la resolución del tribunal, porque se trata de un abigeato agravado y el castigo es muy leve”, remarcó el jurista.

El artículo que establece la sentencia contra el abigeato en el Código Penal se divide en dos partes: En primera instancia se establece una sanción de uno a cuatro años y en el mismo texto cita una agravante del abigeato con una pena de cuatro a seis años.

En las causales de la agravante está que el robo corresponda a más de dos cabezas de ganado y que estas sean de raza, en este caso Nelore.

Implicados

Por otra parte, informó que inicialmente los acusados eran cuatro, uno de ellos Rubén Darío V.B, un transportista que fue absuelto y el otro falleció de manera imprevista hace un par de años.

También indicó que los sentenciados eran parte de una asociación delictiva que durante varios años movió las reses de una propiedad a otra, para ocultar la falta de las mismas que eran vendidas a terceras personas.

Esta acción se facilitaba porque Juan Marcelo Salvatierra Rojas era el administrador de las propiedades afectadas y Darko Kanez Araya era la persona encargada de seleccionar el ganado junto con el fallecido.

“Un testigo del juicio indicó que los implicados vacunaban en una de las propiedades durante el día y en la noche trasladaban a otra hacienda a los animales en camiones o inclusive a pie. Además usaban tractores y ramas para limpiar las huellas”, agregó.

Pérez manifestó que no les importaba vacunar dos o tres veces a los mismos animales para sumar la cantidad de ganado que tenían que cubrir. En esa época la víctima tenía como 10 mil reses.

Fuente: Publiagro