Así lo destaca Freddy Garcia, segundo vicepresidente de la CAO, al señalar que por las informaciones climatológicas que tenían, no era conveniente sembrar tardíamente el maíz en la campaña de invierno.
“Nosotros sembramos de acuerdo a las perspectivas climatológicas, no podemos aventurarnos a tener fracasos en la siembra si no se tienen buenas perspectivas climatológicas, hasta donde conocíamos desde la CAO, las perspectivas climatológicas del invierno en esta campaña iban a ser bastante secas y había que tener en cuenta eso”, dice García.
En relación a la siembra realizada por Emapa en la zona de Guarayos, señala que se debió ver las condiciones climatológicas, es decir cómo se comportaba el invierno para no arriesgar la producción.
“Teníamos informaciones climatológicas que se venía un invierno seco, que no era muy aconsejable realizar siembras tardías en invierno porque iban a llevar demasiado riesgo para la producción, en este caso me imagino que ellos habrán tomado en cuenta algunas perspectivas climatológicas de cómo se iba a comportar el clima para poder proceder con la siembra”, dice mientras lamenta que este año no se producirá la cosecha de maíz que necesita el país.
Al referirse al rendimiento agrícola en las zonas maiceras como Guarayos, asegura que cuando hay condiciones climatológicas adecuadas, se logran buenos resultados con la siembra de maíz ya que se llega a una producción de cuatro y hasta siete toneladas por hectárea, lo mismo sucede en la zona del Chaco.
«Sin embargo, en las condiciones actuales es muy difícil que los productores logren llegar a esas metas», recalcó.
Respecto al rendimiento que podría lograr el gobierno en la zona de Guarayos, el dirigente y además agricultor, se basa en las fotografías de la zona.
“De acuerdo a las fotografías que hemos visto de la siembra en Guarayos, hay dos momentos claves en que el maíz necesita bastante agua que es el momento donde crece la hoja de donde sale la mazorca y la otra es cuando el maíz está en flor. Como podemos observar en el momento en que está ese maíz, hay un déficit hídrico por lo tanto se puede decir que van a tener rendimientos menores a los que se estima tener”, dice.
Sin embargo, prefiere no aventurarse a dar números.
«En relación a los rendimientos no me puedo aventurar a señalar números, pero en 700 hectáreas en situación normal, suponiendo a cuatro T. por hectárea, otorga unas 2.800 T., pero la demanda interna de Bolivia por consumo de maíz es de 1.300.000 T., por lo que no es significativo», refirió el entrevistado.
Fuente : Publiagro