El proyecto que entra en su tercera fase busca una transformación sostenible de los sistemas agroalimentarios y contribuir a la aplicación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
El objetivo general de la Fase III del Programa de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y China es prestar apoyo a los países en desarrollo para el logro de una transformación sostenible de los sistemas agroalimentarios y contribuir a la aplicación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La FAO firmó el acuerdo con el Gobierno chino que pone oficialmente en marcha la Fase III del referido Programa de Cooperación Sur-Sur.
De acuerdo a un boletín de la FAO, publicado en su portal web, este ambicioso emprendimiento social abarca seis esferas temáticas fundamentales, a saber: la producción y productividad agrícolas; las cadenas de valor y el comercio; la agricultura tropical y el cultivo de secano.
Asimismo atiende el fomento de la resiliencia, la intervención en situaciones de emergencia, la gobernanza mundial y las zonas agrícolas tradicionales.
Prestará igualmente una atención especial a la pérdida y el desperdicio de alimentos, la innovación y la agricultura digital, entre otros.
Este proyecto se estableció en 2009 con una contribución inicial de 30 millones de dólares para la Fase I, que permitió el intercambio de conocimientos y experiencia entre China y otros países del Sur del mundo.
En 2015, China realizó una nueva aportación de US $50 millones para la Fase II. El Programa de la FAO y China ha alcanzado resultados significativos hasta la fecha, refiere la nota de prensa.
En ese marco se han ejecutado un total de 25 proyectos nacionales, regionales, interregionales y mundiales para apoyar el desarrollo agrícola y la seguridad alimentaria en consonancia con las prioridades y necesidades de los países.
El Programa ha atendido a más de 100.000 beneficiarios directos y varios cientos de miles de beneficiarios indirectos en comunidades de las zonas rurales.
Expertos chinos enviados a países hospedantes han transferido tecnologías prácticas y adaptables ofreciendo demostraciones y actividades de capacitación en función de la demanda en colaboración con contrapartes locales.
Igualmente, se han organizado más de 50 actos y actividades mundiales sobre desarrollo de la capacidad con la participación de miles de funcionarios públicos, expertos técnicos, pequeños agricultores y otras partes interesadas de más de 100 Estados miembros de la FAO, entre los cuales, obviamente se encuentra Bolivia.
La introducción con éxito de nuevas tecnologías mediante la cooperación Sur-Sur y triangular en muchos países ha contribuido a aumentar la seguridad alimentaria, especialmente a través de la mejora de la productividad agrícola, la diversificación de los productos alimentarios, la producción animal y pesquera en pequeña escala y las rentas rurales.
En los dos últimos decenios, se ha invertido un total de US $370 millones de USD en actividades y proyectos de cooperación Sur-Sur y triangular.
Fuente: FAO
Redacción: Publiagro