El Gobierno deja sin efecto ‘Bolsa de Productos’ que fija precios a los alimentos

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La decisión fue revelada por el viceministro, Weimar Pereira, quien la pasada semana, citado en la estatal ABI, anunció dicho proyecto estatal. Empresarios y economistas refutaron la iniciativa denotando que desincentivaría la producción

El Gobierno retrocede y deja sin efecto la propuesta de creación de una ‘Bolsa de Productos’ para fijar los costos de producción y los precios de comercialización de alimentos y mercancías en el mercado interno.

 

La decisión fue revelada por el viceministro de Producción Industrial a Mediana y Gran Escala, Weimar Pereira, quien la pasada semana, citado en la agencia estatal de noticias ABI, anunció dicho proyecto estatal.

 

El anuncio de dicha propuesta fue refutado por empresarios del sector privado y economistas quienes visibilizaron un desincentivo a la producción nacional. A decir de Pereira, el planteamiento de la ‘Bolsa de Productos’ fue un planteamiento que oficialmente se deja sin efecto; es decir, no se avanzará en el desarrollo de esta temática.

 

No se considerará más esta propuesta”, mencionó. La pasada semana, el viceministro indicó que la propuesta, entre sus alcances, establecía las posibilidades y los costos reales de producción que permitirá establecer, con soberanía, los precios del mercado y, fundamentalmente, un equilibrio entre los costos de producción y de venta de la industria.

 

Además, que haría posible tener información sobre cuánto le corresponderá al empresario pagar por la producción y el margen de utilidad que estará disponible por sus operaciones. Desde la Cámara Nacional de Industrias (CNI), su presidente Ibo Blazicevic, calificó de preocupante la medida detallando que va en contra del modelo que defiende el Ministerio de Economía.

 

“Creemos que no tiene el aval de esta cartera de Estado y, en todo caso, es el principio del fin… si se promulga”, exclamó, al advertir que la fijación de precios desincentiva la producción.

 

Otras fuentes del empresariado nacional, que pidieron el anonimato, indicaron que cualquier control de precios desanima la inversión del productor y en el largo plazo genera escasez. “Si ahora los costos suben por salarios y otras causas, que encima le pongan un techo a los precios”, refutaron.

Mirada externa

El economista y jefe del Centro Boliviano de Estudios Econó- micos (Cebec) de Cainco, Pablo Mendieta, tejió un análisis en sentido de que por más buena voluntad que pueda existir, se desconocían los criterios técnicos que usarían y el grado de discrecionalidad para fijar los márgenes de los productos de la bolsa. “Si los precios se fijan arbitrariamente implicaría menor producción y precios distorsionados”, dedujo. Para el economista José Gabriel Espinoza, este tipo de medidas terminaría de ‘matar’ la poca oferta nacional de productos básicos y nos haría, como país, aún más dependiente de las importaciones.

“En la medida que el tipo de cambio se vuelva cada vez más insostenible, incrementa la vulnerabilidad de las familias más pobres ya que gran parte de los alimentos que consumen estas familias son importados y susceptibles de subir de precios en momentos de devaluación”, precisó.

Enfoque sectorial

Desde la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), su gerente general Jaime Hernández, indicó que la organización acompaña el proceso de conformación de una ‘Bolsa de Productos’, principalmente para artículos agropecuarios, que impulsa el Ministerio de Desarrollo Productivo con el apoyo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).

 

“Tendría como base un enfoque de oferta y demanda para transparentar la formación de precios, principalmente para soya, maíz, trigo, girasol y sorgo, en base al mercado interno y su cotización en el exterior”, dijo.

En representación del IICA en Bolivia, Santiago Vélez, indicó que una bolsa es un mecanismo de venta que fomenta un mercado abierto y transparente donde se tranza sobre la base de oferta y demanda. Dijo que la organización, desde 2018, trabaja en este proceso.

 

Fuente: Periódico El Deber