Tras varios días de conflicto en Santa Cruz que movilizó a los productores de soya en exigencia a un mejor precio interno del grano, el Gobierno anunció ayer la exportación de 2 millones de toneladas de soya que será materializada mediante la reglamentación del Decreto Supremo 3920.
“La ministra (Nélida) Cifuentes (de Desarrollo Productivo) desde el día miércoles está en su despacho con esta resolución que nosotros ya hemos firmado, y seguramente el día hoy (ayer) lo van a despachar. Queremos decir que estamos liberando el 60 por ciento que son alrededor de 2 millones de toneladas de soya que se puede exportar”, afirmó el ministro de Desarrollo Rural, César Cocarico.
El presidente de la Asociación Nacional de Oleaginosas (Anapo), Marcelo Pantoja, prevé que esta cifra alivie las pérdidas económicas por la falta de mercados al excedente de soya y el bajo precio que pagan las industrias.
“Son como 1,8 a 2 millones de toneladas que se van a exportar. Esa cifra corresponde al 60 por ciento de la producción nacional”, dijo Pantoja.
En 2018, la producción fue de 2,4 millones de toneladas de soya; para la campaña de verano 2019, se estima que la cifra suba a 2,7 millones.
El 40 por ciento de la producción va destinado al mercado interno y el 60 por ciento era excedente.
De acuerdo a Pantoja, los principales mercados externos son Perú, Paraguay y Brasil. Desde hoy, el Gerente de Anapo viajará a Brasil “en busca de nuevos mercados” para el grano dorado.
Respecto a la demanda de los medianos y pequeños productores de soya, que exigían a las industrias nivelar el precio de acuerdo a la cotización internacional, Pantoja aseguró que no se llegó a ningún acuerdo.
Los agricultores decidieron retirar la soya que se encuentra almacenada en las industrias e iniciar los trámites para la exportación a un precio base de 280 dólares, 39 más que el ofertado por las empresas nacionales.
“Mientras no paguen, (las industrias) tienen que devolver el grano”, enfatizó.
Explicó que “cualquier silo” del país cobra 10 dólares al mes por el almacenaje del grano, que luego de ese tiempo se añade 3 dólares más. Calcula que cada productor no pague más de 16 a 18 dólares.
El ministro Cocarico y Pantoja coincidieron en que el único tema pendiente con los productores es el uso de biotecnología en los cultivos del grano para mejorar el rendimiento.
“Respecto al tema de la biotecnología, se ha trabajado hasta el pasado martes. Han concluido con la redacción para que en la campaña de verano podamos hacer uso de las semillas transgénicas”, dijo Cocarico.
Fuente: Periódico La Prensa