Más de 218.000 personas de más de 50 países han participado como sujetos del estudio realizado por la Universidad McMaster de Hamilton, en Canadá
“Sé que este filete no existe. Sé que cuando me lo meto en la boca es Matrix la que le está diciendo a mi cerebro: es rico y sabroso. Después de nueve años, ¿sabes de lo que me doy cuenta? La ignoracia es la felicidad”, es la frase de la peícula Matrix usada por los amantes de la carne roja para justificar el consumo de este producto. Esto es debido a la enorme cantidad de estudios que, desde hace décadas, lo han relacionado con diversas enfermedades.
Esa justifiación podría llegar a su fin y es que un nuevo estudio realizado por la Universidad McMaster de Hamilton, en Canadá, dice que las recomendaciones de autoridades sanitarias como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o el NHS (servicio nacional de salud británico) acerca del consumo máximo saludable de carne roja son erróneas.
El profesor Salum Yusuf, uno de los autores del estudio y director del Population Health Research Institute de la McMaster University, señala “lo que creemos que es una dieta saludable para la población general tiene que ser reconsiderado. Por ejemplo, nuestros resultados muestran que la carne roja es beneficiosa para la salud cardíaca y para la longevidad, lo que difiere de los ‘saludables’ estándares nutricionales actuales”.
Más de 218.000 personas de más de 50 países han participado como sujetos de estudio. Esto significa, según otro de los autores del estudio, el doctor Mahshid Dehgan, que “los resultados se aplican a gente de diferentes partes del mundo, con lo que son extrapolables de forma global”.
De acuerdo con Maria del Carmen Abela, jefa de la carrera de nutrición de la Universidad Nacional Ecológica, la carne de res tiene muchos beneficios, ya que contiene todos los aminoácidos completos, que son necesarios para la formación de los músculos de los seres humanos.
La experta aconseja consumir carne de res tres veces a la semana. Las porciones ideales son un bife de entre 80 y 120 gramos (tamaño de una palma de la mano humana, incluidos los dedos) y del grosor de un dedo meñique. En el caso de una hamburguesa, la porción de carne tendría que ser del tamaño de la palma de la mano e igualmente el grosor de un dedo meñique.
Para Abela hay que acompañar el consumo de la carne de res con todo tipo de verduras y un carbohidrato, ya sea arroz, papa o yuca.
Fuente: Periódico El Deber