



El sector piscícola de la provincia Manco Kapac, en el departamento de La Paz, recibió un importante impulso productivo con la entrega de 153 jaulas de cultivo de trucha, destinadas a 99 familias de piscicultores en los municipios de Copacabana y Tiquina. Esta acción refuerza la cadena de valor de la acuicultura en el lago Titicaca, donde la trucha se consolida como un alimento estratégico y fuente de desarrollo económico regional.
Las comunidades beneficiarias —Jiskakota, Corihuaya, San Miguel de Hueco y Titicachi— integran asociaciones organizadas que se dedican a la cría sostenible de peces en espejo de agua, una actividad que ha transformado la economía local, generando empleo rural y garantizando proteína de calidad para el consumo boliviano.
La dotación incluye no solo las jaulas flotantes, sino también redes de cultivo, equipos de selección, hidrolavadoras, balanzas y alimento balanceado. Esto permitirá sembrar más de 126.000 alevines de trucha en 3.060 metros cuadrados de espejo de agua, con una proyección estimada de casi 38 toneladas de carne de pescado fresco en el corto plazo.


“La trucha del Titicaca no solo alimenta, sino que genera empleo, arraigo y desarrollo productivo para las comunidades andinas”


La iniciativa tiene un efecto multiplicador: al fortalecer la producción primaria, se dinamiza el comercio en ferias locales, se provee materia prima a las plantas procesadoras del altiplano y se afianza la identidad productiva del lago Titicaca como polo acuícola andino.
“El trabajo con trucha nos da ingresos constantes y nos permite quedarnos en nuestras tierras”, expresó un productor de San Miguel de Hueco. “Ahora con más jaulas y alimento asegurado, podemos pensar en una producción más estable durante todo el año”, agregó.
Los piscicultores de esta región no solo abastecen mercados locales, sino que también proyectan llegar a nuevas plazas comerciales con un producto fresco, saludable y cultivado bajo estándares comunitarios sostenibles.
Esta entrega forma parte de un modelo que prioriza la economía familiar campesina y promueve una acuicultura adaptada al ecosistema del lago, respetando su biodiversidad y cultura ancestral.
Fuente: MDRyT
Redacción: Publiagro

