Yamid Sanabria, técnico del Fondo Latinoamericano para Arroz de Riego (FLAR) en Colombia, enfatizó la necesidad de que Santa Cruz adopte un enfoque de futuro en cuanto a genética y desarrollo de nuevas variedades de arroz. 

Según el experto, es crucial que el sector arrocero se anticipe a los cambios climáticos, la gestión de recursos y el factor agua, aspectos que impactan directamente en la producción. Para ello, los agricultores deben adaptarse a las nuevas condiciones, lo que implica un esfuerzo constante en mejoramiento genético.

Si bien las variedades de arroz que actualmente utilizan los productores son de alta calidad, Sanabria sostiene que el rendimiento podría ser mucho mayor si se adoptaran mejores prácticas agronómicas. «Eso es lo que le falta al sector arrocero», afirmó.

Uno de los principales desafíos es la inminente necesidad de reemplazar la variedad MAC 18, una de las más cultivadas en la región. Sanabria explicó que esta variedad se encuentra en su etapa final, ya que ninguna puede mantenerse por muchos años sin perder rendimiento y capacidad de adaptación. 

«Ya tenemos que ir viendo cómo reemplazar a la MAC 18 con una nueva variedad que mantenga la calidad, aumente el rendimiento y que sea de fácil manejo para el agricultor», señaló.

«Ya tenemos que ir viendo cómo reemplazar a la MAC 18 con una nueva variedad que mantenga la calidad, aumente el rendimiento y que sea de fácil manejo para el agricultor»

El FLAR, entidad responsable de proveer nuevas variedades de semillas de arroz al CIAT, realiza mejoramiento genético convencional. Sin embargo, en los últimos años han acelerado los procesos debido a que, desde el cruzamiento hasta la obtención de una variedad estable, el desarrollo puede tomar un tiempo considerable.

«Nosotros en la primera etapa estamos tratando de ir más rápido para poder llegar a una etapa de estabilización de las líneas que nos permita hacer evaluaciones más consistentes y así entregar variedades más rápido», detalló Sanabria. En este sentido, la modernización del FLAR se centra en la rapidez y eficiencia de los procesos de mejoramiento genético.

Finalmente, el experto recomendó a los productores utilizar semilla certificada y aplicar las mejores prácticas agronómicas. Destacó que estas prácticas no necesariamente implican un mayor gasto, sino una gestión eficiente del cultivo: «Realizar siembras en épocas correctas, un buen manejo del agua y de los fertilizantes garantiza el éxito en la producción».

El llamado de Sanabria resalta la importancia de la innovación y la adopción de tecnologías para que el sector arrocero en Santa Cruz pueda mantenerse competitivo y productivo en un entorno de cambios constantes.

Fuente: Yamid Sanabria
Redacción: Publiagro