La crisis por la falta de dólares y el desabastecimiento de carburantes está generando un fuerte impacto en las cadenas de producción, transporte y comercialización de alimentos en Bolivia. Productores y comerciantes advierten que estos factores, atribuibles a la gestión del Gobierno, están provocando un incremento considerable en los costos, afectando la oferta de productos esenciales para la población.
El sector agropecuario y comercial afirma que el aumento de los precios en productos tanto importados como nacionales es consecuencia directa de la falta de divisas, lo que ha encarecido las importaciones, y del insuficiente suministro de diésel, que dificulta las operaciones logísticas.
“Llevamos más de un año con alta inestabilidad en el abastecimiento de carburantes, y esto se resuelve únicamente garantizando la oferta del producto hasta cubrir la demanda”, reclamaron los productores en una reunión sostenida en Cochabamba con los diferentes sectores relacionados a la actividad productiva.
A esta situación se suma la reciente aprobación de la Disposición Adicional Séptima de la Ley 1613 (Presupuesto General del Estado – Gestión 2025), que, según denuncian los actores del sector, ha generado una “inseguridad jurídica total”. La normativa permitiría al Estado confiscar productos considerados como acaparados o especulados, una medida que los productores califican de arbitraria y que, aseguran, agravará la crisis de abastecimiento.
“Llevamos más de un año con alta inestabilidad en el abastecimiento de carburantes, y esto se resuelve únicamente garantizando la oferta del producto hasta cubrir la demanda”
“Las autoridades, en vez de buscar soluciones de fondo, aplican la intervención y el amedrentamiento. Esto no solo no resuelve la escasez de productos como arroz y aceite, sino que la profundiza”, señalaron.
El sector advierte que, ante las actuales condiciones económicas y normativas, muchos productores podrían optar por reducir sus operaciones o salir del mercado, lo que impactaría directamente en el consumidor final. “Nadie va a producir a pérdida o bajo el riesgo de que le confisquen sus productos”, enfatizaron.
La solución a la crisis, aseguran los productores, pasa por garantizar el suministro de carburantes y resolver la falta de dólares. “El Gobierno debe colocar mayor disponibilidad de divisas para que el sector pueda seguir importando insumos al precio internacional. No es el precio lo que nos encarece, sino la falta de dólares en el mercado interno”, explicaron.
Finalmente, el sector hizo un llamado al Gobierno y al poder legislativo para que se derogue la Disposición Adicional Séptima de la Ley 1613, considerando que su aplicación podría generar un escenario de arbitrariedad y extorsión por parte de algunos funcionarios públicos.
Fuente: CONFEAGRO
Redacción: Publiagro