La gestión eficiente de costos en tiempos de crisis está estrechamente vinculada a los efectos del cambio climático, que no solo afectan la salud de las aves, sino también la humana. Este fenómeno está provocando la aparición de enfermedades nuevas y contribuyendo al agravamiento de otras, principalmente virales. El doctor Iesser Duarte Salah, consultor para Latinoamérica de Ilender Corporation, explicó diversas prácticas de manejo que podrían mitigar estos problemas y, al mismo tiempo, reducir los costos de producción.

Actualmente, en Bolivia, uno de los principales retos es el brote de una cepa de bronquitis del grupo 2, que ha generado importantes pérdidas económicas debido a la mortalidad de las aves. El doctor Duarte señala que este brote también afectó gravemente a Brasil.

«Pero también es preocupante la aparición de nuevas amenazas virales en todo el mundo, como la Laringotraqueitis, que recientemente se registró en Brasil, el síndrome del pollo enano, el virus de Gumboro, entre otros», comentó.

En Bolivia, el desafío radica en prevenir que estas nuevas variantes, como la cepa israelí, lleguen al país, ya que están causando estragos en otras naciones. La bioseguridad, según Duarte, juega un papel crucial, no solo para lograr un control adecuado de los costos, sino para garantizar productos de calidad y seguridad alimentaria. Además, la bioseguridad asegura que haya disponibilidad de productos para comercializar, ya que los brotes pueden afectar gravemente la producción.

«La bioseguridad es el aspecto más importante en el que las empresas deben enfocarse, ya que no solo influye en los costos, la rentabilidad y la calidad del producto, sino que también es fundamental para la supervivencia misma de la empresa», afirmó.

“La bioseguridad es el aspecto más importante en el que las empresas deben enfocarse, ya que no solo influye en los costos, la rentabilidad y la calidad del producto, sino que también es fundamental para la supervivencia misma de la empresa”

Gestión de Costos en la Avicultura
El doctor Duarte también destaca que, dejando a un lado las enfermedades, la gestión eficiente de costos es esencial para la rentabilidad del sector avícola, especialmente en tiempos de crisis. Aunque los costos de insumos, como alimentos para aves y energía, han aumentado, existen varias estrategias que las empresas pueden implementar para reducir costos y mantener la competitividad.

1. Optimización del uso de alimentos: El costo de la alimentación representa una gran parte de los gastos en la producción avícola. Mejorar la conversión de alimentos, es decir, la cantidad de alimento necesario para producir un kilogramo de peso vivo, puede reducir significativamente los costos. Esto se logra con la mejora genética de las aves y una nutrición más eficiente.

2. Reducción de costos operativos: Las grandes granjas y las integraciones verticales pueden aprovechar las economías de escala para disminuir los costos operativos. Además, el uso de tecnologías de automatización en áreas como el monitoreo de la salud de las aves y la gestión de la temperatura en los galpones mejora la eficiencia operativa.

3. Diversificación e innovación: En algunos casos, diversificar la producción hacia productos de valor agregado, como huevos orgánicos o pollos criados al aire libre, puede generar mayores ingresos, compensando así los costos adicionales de producción.

«Adoptar estas y otras estrategias permite a las empresas avícolas enfrentar mejor las crisis económicas y mantener su competitividad en el mercado», concluyó Duarte.

Fuente: Isser Duarte 

Redacción: Publiagro