El problema de la falta de diésel sigue sin resolverse en Bolivia, y las largas filas en los surtidores se han vuelto un obstáculo constante, especialmente para los sectores productivos del país. La situación ha llegado a tal punto que representantes de los sectores productivos se reunirán este viernes 15 con el gobierno para tratar la crisis. Klaus Frerking, vicepresidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), informó que solo el sector agropecuario requiere 320 millones de litros de diésel al año para sus operaciones, mientras que el consumo nacional total alcanza los 380 millones de litros anuales.
“La propuesta de la CAO es muy clara. Junto con el sector de transporte y los gremialistas, estamos planteando un decreto de emergencia que permita la libre importación y comercialización de diésel, de manera que los privados puedan empezar a traer el combustible y garantizar su abastecimiento. Eso es lo que se va a plantear en la reunión”, detalló Frerking en una entrevista con un medio televisivo nacional.
Desde el sector ganadero, las quejas también son contundentes. Según Walter Ruiz, presidente de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), la falta de diésel ha generado un perjuicio evidente, ya que el sector depende de una estructura adecuada para mantener a los diez millones de cabezas de ganado en las regiones de Beni y Santa Cruz. En el departamento de Beni, la situación es especialmente crítica, pues las cisternas con diésel simplemente no llegan, comentó Ruiz.
“La propuesta de la CAO es muy clara. Junto con el sector de transporte y los gremialistas, estamos planteando un decreto de emergencia que permita la libre importación y comercialización de diésel, de manera que los privados puedan empezar a traer el combustible y garantizar su abastecimiento. Eso es lo que se va a plantear en la reunión”
“En Beni no hay esperanza de que llegue pronto el combustible. Mientras tanto, en Santa Cruz, hemos contactado al transporte de ganado y nos informan que hay 70 camiones, cada uno con capacidad para transportar hasta 25 cabezas, que están detenidos, sin posibilidad de moverse”.
Ruiz añadió que, para abastecer a los diferentes departamentos, Santa Cruz necesita realizar una faena diaria de 2,000 animales. Sin embargo, la falta de diésel pone en riesgo esta cadena de suministro. “Si no hay diésel, si no hay camiones, esos animales, que además no están siendo atendidos técnicamente como deberían, sencillamente no llegarán a los hogares de los bolivianos”, subrayó.
El sector ganadero consume alrededor de 60 millones de litros de diésel al año, aunque, dependiendo de la época, la demanda puede aumentar considerablemente, especialmente en situaciones de emergencia. Ruiz explicó que la crisis de los incendios forestales ha agravado la situación, ya que las quemas de pastizales han reducido las fuentes de alimento para el ganado, lo cual requiere el uso de más diésel para adquirir y transportar alimentos adicionales.
“En estos momentos el sector ganadero necesita ese combustible para brindar una asistencia oportuna tanto a los productores como al ganado. Además, sin lluvias suficientes, no podemos predecir cuándo mejorará esta situación y cuánto diésel se necesitará realmente”, enfatizó.
Finalmente, Ruiz lamentó que la situación ha llegado a un punto insostenible para muchos productores, quienes han decidido abandonar sus actividades debido a la falta de soluciones efectivas para la crisis del diésel.
Fuente: Red Uno
Redacción: Publiagro