Shiro Nishimura es uno de los propietarios de Jacto y fundador de la Confraria de Carcasa Nelore.

Jacto es un grupo empresarial que comenzó como una pequeña oficina en Pompeia, en el interior de São Paulo, Brasil. Fue allí donde Shunji Nishimura, el fundador y padre de Shiro, creó en 1948 la primera espolvoreadora brasileña. Con el tiempo, el negocio creció y se expandió hasta convertirse en un grupo presente en los cinco continentes.

Shiro Nishimura trabajó en Jacto durante aproximadamente 25 años. Sin embargo, tras su jubilación, decidió dedicarse a su sueño de ser ganadero. Este cambio de rumbo le permitió fundar la Confraria de Carcasa Nelore, una organización enfocada en la producción de carne de calidad.

“Trabajé durante años en la compañía, pero luego empecé nuevos sueños y ese sueño era ser ganadero, y fue un cambio porque yo quería producción de carne de calidad utilizando herramientas como la DGT, una herramienta de mensuración.

‘Hoy mejor que ayer, mañana mejor que hoy’, un trabajo que yo he aplicado en la finca”, señaló, refiriéndose a su enfoque en la mejora continua y el uso de tecnología para optimizar la producción ganadera.

“Siempre en un negocio habrá peleas, discusiones, pero lo importante siempre es llegar a un acuerdo, así la empresa progresa”

La visita de Shiro Nishimura a Santa Cruz tuvo como objetivo brindar una charla motivacional a productores, compartiendo sus experiencias en el trabajo de una empresa familiar, los retos y aprendizajes, y los factores clave para mantener un negocio familiar en marcha. Nishimura subrayó la importancia de los valores que el líder de la familia —el padre— puede inculcar en sus hijos. Señaló que estos valores son fundamentales, especialmente cuando los hijos pueden tener aspiraciones diferentes y no desear continuar con el negocio familiar. Para él, lo importante es respetar aquello y apoyar.

“Siempre en un negocio habrá peleas, discusiones, pero lo importante siempre es llegar a un acuerdo, así la empresa progresa”, destacó Nishimura, enfatizando que las diferencias son naturales, pero que la clave está en encontrar puntos de acuerdo para avanzar en unidad.

Además, subrayó que más que el negocio, hay que cuidar la familia, resaltando la importancia de la unión familiar por encima de las ganancias económicas.

“El dinero es voluble, se gana y se pierde, pero el enfoque debe mantenerse en la familia unida; es el mayor tesoro que se puede guardar”, concluyó.

Fuente: Shiro Nishimura

Redacción: Publiagro