La nueva banda de precios de EBA amenaza la viabilidad de la industria lechera en Cercado y Marbán, mientras los productores denuncian el incremento de costos y buscan apoyo gubernamental para enfrentar la crisis

Reunión de productores lecheros del Beni/ Foto: Publiagro

Los productores de leche de las provincias de Cercado y Marbán en el departamento del Beni han expresado su preocupación ante la imposición de una nueva banda de precios para la leche, establecida por la industria estatal Empresa Boliviana de Alimentos (EBA), bajo la dirección de Javier Freire, gerente general de la entidad. Raúl Eggers Añez, presidente de la Central de Productores Lecheros de Cercado y Marbán (CERMA), junto con los afiliados a esta organización, sostuvieron una reunión para discutir las implicaciones de esta medida que consideran perjudicial para la industria lechera local.

Actualmente, la industria paga un precio de Bs. 3,50 por litro de leche, pero la nueva banda de precios enviada por EBA establece un valor de Bs. 3,15 por litro, lo que representa una disminución significativa y convierte a esta tarifa en la más baja del país.

«Esto significa que quieren deshacer la industria lechera que tenemos en el Beni. Que se nos quiera bajar el precio de la leche sería matar la industria, una industria que ha costado cerca de 100 millones de bolivianos, una industria que es de todos los benianos, y nosotros como productores estamos dispuestos a pelearla», hizo énfasis Eggers.

«Esto significa que quieren deshacer la industria lechera que tenemos en el Beni. Que se nos quiera bajar el precio de la leche sería matar la industria, una industria que ha costado cerca de 100 millones de bolivianos, una industria que es de todos los benianos, y nosotros como productores estamos dispuestos a pelearla»

La preocupación de los productores no solo se centra en la reducción del precio, sino también en el contexto económico actual. Eggers explicó que, mientras el precio de la leche está siendo reducido, los costos de producción han aumentado significativamente debido a la subida de los precios de los insumos y productos veterinarios necesarios para mantener la producción lechera.

«De acuerdo a esa banda de precios, el costo de la leche tiene que bajar, teniendo en cuenta que hace mucho los productores lecheros pidieron que se mejore el precio, ya que los insumos y todos los productos veterinarios han subido», añadió.

Eggers también criticó la falta de conexión de las autoridades de la industria con la realidad que enfrentan los productores. «Pareciera que la gente que está administrando la industria viviera en otro país, porque la realidad que estamos viviendo es otra. Pedimos a las autoridades que puedan bajar para poder determinar a través de una estructura cuánto cuesta producir un litro de leche», insistió, subrayando la necesidad de un análisis detallado de los costos de producción que refleje las condiciones reales de los productores lecheros del Beni.

  1. El panorama se complica aún más con la reciente apertura de oportunidades para la exportación de leche al país vecino, Chile. Eggers recordó que, ante esta nueva posibilidad, es esencial que los predios lecheros estén preparados, lo que requiere mejoras sustanciales en la infraestructura y en la capacidad de producción. Para ello, los productores han solicitado al gobierno recursos económicos, específicamente a través de créditos blandos gestionados por el Sistema de Intermediación Financiera Bolivia (SIF Bolivia), con el fin de hacer estos créditos más accesibles para los productores.Además, Eggers mencionó un aspecto crítico del funcionamiento de la industria en la región.

     «Son todos los socios los que pagan alquiler y la energía para que funcionen los centros de acopio. Es la única asociación en Bolivia». Esta situación resalta la carga financiera adicional que asumen los productores, quienes deben cubrir costos operativos que, en otras regiones, podrían estar subvencionados o al menos compartidos. La combinación de estos factores hace que la reciente decisión de EBA sea vista como una amenaza directa a la sostenibilidad de la industria lechera en el Beni, una industria que ha sido desarrollada y sostenida con el esfuerzo de los productores locales.

 

 

Fuente: Raul Eggers 

Redacción: Publiagro