Expertos destacan la importancia de un enfoque integral de bioseguridad y manejo nutricional para controlar la propagación de Salmonella y proteger la salud avícola y humana
La salmonelosis es una enfermedad que afecta a aves, personas y animales, y se encuentra ampliamente distribuida en diversas regiones del mundo. Su control es complicado debido a la prevalencia de la enfermedad y a la variedad de tipos de salmonella. Según el doctor Óscar Jiménez, técnico en sanidad de la empresa Serveco, «Existen varios tipos de salmonela, algunas son zoonóticas y pueden afectar a las aves y también a las personas».
Entre las salmonelas más comunes en aves se encuentran la Salmonella gallinarum y la Salmonella pullorum. Estas bacterias pueden provocar problemas significativos en la producción avícola, como disminución en la producción de huevos, fertilidad e incubabilidad.
Esto puede ocurrir tanto en portadoras inaparentes como en aves que presentan signos sistémicos de la enfermedad. Las lesiones observadas en aves jóvenes incluyen reabsorción incompleta del saco vitelino, peritonitis y signos de septicemia.
La Salmonella gallinarum es particularmente incidente y puede ser transmitida de dos maneras: horizontal y vertical. La transmisión horizontal ocurre mediante el contacto directo entre individuos, vectores, o a través de alimentos o agua contaminada. La transmisión vertical, por otro lado, se da de la madre a la progenie. Este tipo de transmisión es una preocupación significativa porque puede llevar a la propagación de la enfermedad dentro de un lote de aves.
«En el caso de la bacteria Salmonella gallinarum, esta entra por vía oral, logra pasar la barrera del pH del estómago, llega hasta los intestinos y puede migrar a órganos como el hígado, el bazo, la médula ósea y, en casos entéricos, puede permanecer en el intestino»
- Síntomas de la SalmonelosisLos síntomas de la salmonelosis en aves incluyen decaimiento general, erizamiento de las plumas, somnolencia, falta de apetito y presencia de diarrea. Inicialmente, puede observarse un incremento en la mortalidad y una disminución en la producción. La aparición de estos signos clínicos indica que la enfermedad está afectando negativamente el bienestar y la productividad de las aves.
Patogenia de la enfermedad
La patogenia de la salmonelosis se refiere a cómo la bacteria se comporta dentro del organismo de las aves.
«En el caso de la bacteria Salmonella gallinarum, esta entra por vía oral, logra pasar la barrera del pH del estómago, llega hasta los intestinos y puede migrar a órganos como el hígado, el bazo, la médula ósea y, en casos entéricos, puede permanecer en el intestino», explicó el doctor Jiménez. Este comportamiento patogénico es fundamental para entender cómo la enfermedad se disemina y afecta a las aves.
Consideraciones para el control
Para manejar y controlar la salmonelosis, el doctor Jiménez aconseja implementar un buen programa de bioseguridad. Esto incluye cumplir con las normativas de bioseguridad, capacitar al personal adecuadamente y mantener un control riguroso de los vectores. La implementación efectiva de estas medidas es crucial para reducir la incidencia de la salmonelosis y proteger la salud de las aves y las personas que interactúan con ellas.
En resumen, la salmonelosis representa un desafío considerable para la avicultura, con impactos significativos en la salud y la productividad de las aves. La prevención y control de la enfermedad requieren un enfoque integral que incluya buenas prácticas de bioseguridad y manejo adecuado para minimizar su impacto.
Fuente: Óscar Jiménez
Redacción: Publiagro