El presidente de esa entidad, que representa a la industria oleaginosa, indicó que por eso urge el uso de la biotecnología
La Cámara Nacional de Industrias Oleaginosas de Bolivia (Caniob) se sumó al pedido del uso de la biotecnología en el sector agrícola, para aumentar el rendimiento –principalmente en la soya- y con ello generar el ingreso de divisas para el país por la exportación de los derivados de ese grano como la harina y aceite.
Jorge Amantegui, presidente de esa institución, señaló que desde hace mucho tiempo hicieron esa solicitud en conjunto con la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) y la Cámara Agropecuaria de Pequeños Productores del Oriente (CAPPO) pero hasta ahora no recibieron una respuesta efectiva.
También expresó su preocupación porque, debido al déficit de soya de aproximadamente un millón de toneladas en las últimas campañas, hasta fin de año se dejará de exportar aproximadamente 600 millones de dólares.
“Como parte de la industria oleaginosa esta situación nos preocupa tremendamente, porque con el déficit de casi 1 millón de toneladas de grano de soya para nosotros y para el Gobierno nacional significa dejar de exportar a fin de año casi 600 millones de dólares”, dijo Amantegui.
“Como parte de la industria oleaginosa esta situación nos preocupa tremendamente, porque con el déficit de casi 1 millón de toneladas de grano de soya para nosotros y para el Gobierno nacional significa dejar de exportar a fin de año casi 600 millones de dólares”
Acceso a nuevos eventos
La decisión para homologar los nuevos eventos transgénicos está en manos del Gobierno, según el titular de la Caniob, para dar una solución a mediano plazo porque la aplicación de un procedimiento tradicional significa un proceso más largo.
“Estamos en un momento clave porque Bolivia ha entrado al Mercosur y creemos que se puede trabajar en ese marco para agilizar estos procesos y aprobar los eventos, no sólo ingresando al Comité de Bioseguridad que es un procedimiento muy extenso”, aseveró.
Finalmente refirió que con la biotecnología se logrará mayor cantidad de materia prima que se transformará en mayor cantidad de subproductos como la harina de soya y aceite, generará más exportaciones y la cobertura de la demanda en el mercado interno.
Lo contrario significa mayores pérdidas en la cadena oleaginosa comenzando por el sector primario que son los agricultores, el sector industrial y finalmente al Gobierno por la falta de divisas.
Por ese motivo se maneja el concepto de que la biotecnología no es una medida transitoria, sino una solución de fondo que debe ser aplicada en el menor tiempo posible.
Fuente: Jorge Amantegui
Redacción: Publiagro
