Sin embargo, hasta el momento el avance productivo va por buen camino, pero es necesario que llueva
Existe inquietud respecto a lo que pueda suceder más adelante con los diferentes sembradíos de la campaña de invierno. Por el momento, el ciclo productivo del girasol va por buen camino, pero se requiere agua para que pueda desarrollarse con total normalidad.
Ramiro Casazola, productor de soya en Primera Brecha, San Julián, manifestó que sus sembradíos de girasol se encuentran en óptimas condiciones actualmente. Sin embargo, recalcó la necesidad de precipitaciones para que los cultivos puedan expresar su potencial productivo en el campo.
El productor señaló que, a pesar de que los cultivos están mostrando resistencia al frío y al viento, persiste la incertidumbre sobre lo que pueda suceder más adelante en caso de que no llueva.
“Lo importante es la lluvia, ya que la planta con demasiado frío no se desarrolla normalmente, porque necesita también de calor y agua “
Añadió que, en Primera Brecha, la mayoría de los productores han sembrado girasol, mientras que una minoría ha optado por el sorgo. En el caso de Casazola, eligió sembrar girasol ya que el sorgo requiere más agua para sobrevivir y, dadas las condiciones actuales de falta de lluvia, no se animó a sembrar sorgo.
“Lo importante es la lluvia, ya que la planta con demasiado frío no se desarrolla normalmente, porque necesita también de calor y agua “, aseguró.
El productor señaló que no pudo completar la siembra de girasol debido a la falta de agua. Actualmente, tiene sembradas 170 hectáreas, pero aún le faltan 30 hectáreas por sembrar.
“Es increíble no pudimos terminar de sembrar en una semana, el suelo se secó, tengo las semillas guardadas y no sabemos qué va pasar en los próximos días si no llueve”, aseveró.
No pierden la esperanza de que llueva lo suficiente para poder completar la siembra. Según Casazola, el año pasado obtuvo un rendimiento de 1,100-1,200 toneladas por hectárea y este año espera aumentar su productividad.
Fuente: Publiagro