A pesar del desborde del río, agricultores afirman que esto no ha perjudicado a sus cultivos, más por el contrario la lluvia ha contribuido a la siembra afectada por la seca

Cultivos de soya / Foto : Gary Soria

Con las últimas lluvias registradas en el departamento, la riada en San Pedro está disminuyendo gradualmente en 20 centímetros en la cuenca baja. Ante este panorama, los productores de la zona aseguran que el desborde del río no ha afectado a los cultivos; al contrario, la lluvia ha sido un alivio para las plantaciones que habían sido perjudicadas por la sequía.

Gary Soria, productor de soya y arroz en San Pedro, señaló que las lluvias caídas han llegado de manera tardía, lo que resultó en pérdidas inevitables. Sin embargo, mencionó que las precipitaciones actuales beneficiarán a los cultivos que fueron afectados por la sequía, aunque a menor escala.

“No ha habido ninguna afectación a los cultivos por el desborde del río, más bien la lluvia está favoreciendo a la siembra afectada por la seca”, acentuó.

“No ha habido ninguna afectación a los cultivos por el desborde del río, más bien la lluvia está favoreciendo a la siembra afectada por la seca”
Riada cuenca abajo-San Pedro / Foto : Gary Soria

En el caso de Soria, declaró que, a pesar de haber sembrado tarde, el desarrollo de la soya y el arroz está progresando satisfactoriamente. En estos momentos, están a la espera de que el nivel del agua disminuya aún más, ya que están en la semana de cosecha de verano del Norte Integrado para ambos cultivos.

A esto, subrayó que estas lluvias no serán una salvación para la totalidad de sus cultivos; no obstante, representan un alivio para que sus sembradíos puedan tener una producción tardía. Es importante tener en cuenta que esperaban estas lluvias en octubre de 2023 y no en febrero de 2024.

“Habrá algunos agricultores que irán a sacar lo invertido, otros no tendrán nada o por último cosecharán, para decir que ha recuperado su capital”, afirmó.

El productor agrícola sembró 200 hectáreas de soya y otras 200 de arroz. Proyecta una disminución en su productividad, estimando alrededor de una tonelada por hectárea y, en el mejor de los casos, un rendimiento de 1 tonelada 300 por hectárea.

Fuente: Publiagro