Nuevas tecnologías que está optando el productor para aumentar el rendimiento y rentabilidad

Arroz producido en la comunidad Ayacucho / Foto : Publiagro
José Salomón Cardozo, productor de arroz / Foto: Publiagro

En San Juan de Yapacaní se están implementando nuevas tecnologías para mejorar los rendimientos en el cultivo de arroz. La sistematización de parcelas ha dado resultados positivos a los agricultores de la zona, permitiéndoles cosechar con mayor productividad.

José Salomón Cardozo, productor de arroz en la comunidad Ayacucho del municipio de San Juan de Yapacaní, ha introducido innovaciones tecnológicas en la producción de arroz. 

A pesar de la falta de agua en la región y el uso tradicional del sistema de secano, las mejoras implementadas han resultado en un mayor rendimiento y rentabilidad en el cultivo de arroz.

El productor implementó una sistematización en las parcelas, incorporando reservorios de agua, nivelación láser y sistemas de bombeo para aprovechar el recurso hídrico de manera más efectiva. Esta estrategia busca garantizar un mayor nivel de agua a lo largo del ciclo productivo del arroz, lo que contribuye a obtener mejores rendimientos en la cosecha.

Gracias a la implementación de la sistematización en sus 20 hectáreas, el productor ha logrado duplicar la producción de arroz. Anteriormente cosechaba alrededor de 10 a 15 fanegas (aproximadamente 3 toneladas) por hectárea, pero con la actual sistematización, ahora cosecha entre 6 a 8 toneladas por hectárea, lo que equivale a 30 a 40 fanegas. Este aumento significativo en la productividad demuestra el impacto positivo de las nuevas tecnologías y prácticas en la agricultura de la zona.

«Nosotros necesitábamos mejorar los rendimientos en el cultivo y producción del arroz«

“Nosotros necesitábamos mejorar los rendimientos en el cultivo y producción del arroz”, aseguró.

El productor destacó que están trabajando para realizar dos cosechas al año: la primera siembra se realiza desde julio hasta noviembre, y la segunda siembra tiene lugar a mediados de noviembre hasta los primeros días de marzo. 

Además, resaltó la importancia de compartir estas nuevas tecnologías con los pequeños productores para que también puedan implementarlas en sus parcelas y mejorar la producción de arroz en la región. Este enfoque colaborativo contribuye al desarrollo sostenible y a la resiliencia de la agricultura local.

Fuente: Publiagro