Estas enfermedades son transmitidas por la garrapata Boophilus microplus y también por material quirúrgico o agujas infectadas
La babesia (piroplasma) y el anaplasma son dos enfermedades transmitidas por la garrapata que afectan al ganado vacuno y de manera conjunta generan el mal llamado “tristeza bovina”, que genera pérdidas económicas debido a su alta tasa de mortalidad.
Los agentes infecciosos son la Babesia bovis y Anaplasma marginale, que son inoculados por vía transovárica a través de la especie Boophilus microplus, conocida como la garrapata común.
Gyner Arcayne Soleto, asesor técnico y comercial de la empresa Agromel, dio una charla sobre este tema dirigido a un grupo de productores lecheros del Norte Integrado.
“Con la tristeza bovina el animal deja de comer, se produce jadeo, pérdida de peso, baja la productividad de leche. Si no se atiende a tiempo se produce la muerte del animal”, dijo Arcayne.
Como tratamiento de soporte recomendó mantener al animal hidratado, administrar protectores hepáticos, complejo B y para los casos graves incorporar la transfusión.
Vacuna
Bio JAJA se llama la vacuna que comercializa Agromel contra la tristeza bovina, que genera una inmunidad que perdura al menos cuatro años para la babesiosis y para la anaplasmosis la ausencia de infecciones dura para toda la vida del animal.
Su aplicación es aconsejable en bovinos de cuatro a 10 meses de edad, según las recomendaciones técnicas que vienen de origen.
«Con la tristeza bovina el animal deja de comer, se produce jadeo, pérdida de peso, baja la productividad de leche. Si no se atiende a tiempo se produce la muerte del animal»
Anaplasma
El anaplasma afecta a todas las razas de bovinos y es transmitida de dos formas: por garrapatas infectadas de varios géneros incluyendo Dermacentor, Amblyomma, Boophilus y por elementos contaminados.
Cuando los bovinos se infectan desarrollan anemia (reducción de glóbulos rojos), pérdida de peso, aborto, baja de producción de leche y mortalidad aproximada del 36%. Algunos especialistas mencionan que esta puede presentarse entre 50 y 60%.
Babesia
Todas las razas de bovinos son susceptibles y una vez que se recuperan de la enfermedad se convierten en portadores sanos, siendo un riesgo de contagio para animales susceptibles.
La mayoría de los casos se observa en adultos y los animales menores de nueve meses generalmente no presentan síntomas.
En general, los animales infectados desarrollan anorexia y fiebre alta, deterioro de glóbulos rojos y anemia. Los animales pierden el apetito, se aíslan, muestran debilidad y rehúsan a moverse.
Fuente: Publiagro