El costo del grano es de $us 590 la tonelada; un 20% menos, mientras que el aceite de soya cayó de $us 1.700 a $us 1.000. El bajón en la cotización internacional se debe a la nueva cosecha en Estados Unidos.
Merma el precio de los granos en el mercado global. Hasta junio, el costo del grano de soya cayó un 20% con relación al mismo periodo de la anterior gestión, afirma el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), en base a datos oficiales. A la caída del grano se sumó la de los derivados como el aceite de soya que bajó hasta un 42,5%.
María Esther Peña, gerente técnico del IBCE, señaló que las exportaciones de alimentos y productos agroindustriales se manejan y cotizan en precios internacionales por lo que cualquier caída en el mercado global afecta las ventas externas del país.
La ejecutiva explicó que, en el caso de la soya, hasta junio de 2023 estaba en $us 590 la tonelada.
“Es decir, que ha caído casi un 20% el precio del grano de soya correspondiente a lo que es la gestión pasada en el mismo periodo de tiempo”, explicó.
Otro de lo productos que está cotizando a la baja es el aceite de soya.
Según datos del Banco Mundial, en junio de 2023 los precios fueron superiores a $us 1.000 por tonelada. “Sin embargo, el mismo periodo de tiempo -junio- de 2022 fue más de $us 1.700 la tonelada métrica, teniendo una caída del 42.5%”, dijo Peña.
Mientras que la harina de soya, a junio 2023 se cotiza en $us 492 la tonelada, pero en junio de 2022 se cotizaba $us 528. “Tuvo una caída no muy amplia, pero al igual un decrecimiento del 7%. Si hablamos del aceite de girasol, según también el Banco Mundial, en junio del 2023 el precio internacional estaba en más de $us 900 la tonelada métrica y en junio del 2022 estaba en más de 1.884 dólares la tonelada métrica, teniendo una disminución del 52% en el tema de precios internacionales”, agrega Peña.
A escala global, la caída del precio de la soya se explica por las lluvias en zonas productoras necesitadas de agua en Estados Unidos, que presionaron la baja del grano y el maíz, según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
Mientras que un aumento en las tensiones bélicas en el Mar Negro entre Rusia y Ucrania impulsaron hacia arriba al trigo.
Isidoro Barrientos presidente de la Cámara Agropecuaria de Pequeños Productores (Cappo) señaló que por el momento no existe un precio para la soya en el mercado interno, porque recién se está terminando la siembra de invierno.
«̈Es decir, que ha caído casi un 20% el precio del grano de soya correspondiente a lo que es la gestión pasada en el mismo periodo de tiempo»
“Y terminó la siembra y aun no hay precio oficial de parte de las industrias”, señaló.
Sostuvo que a partir de octubre y septiembre se tendrá una referencia exacta sobre el costo del grano. Eso sí, anticipó que hay un promedio de entre $us 410 y $us 420 la tonelada del grano.
Volatilidad
El economista, German Molina, manifestó que el mercado externo actualmente está muy volátil por la guerra entre Rusia y Ucrania.
A esto suma el hecho de que China, según información de organismos internacionales, está entrando un periodo de declinación en su economía.
“Eso nos va a afectar a todo el mundo”, dijo el especialista.
Ante esta situación, según Molina, el sector privado, a diferencia del público, tiene que ajustar sus costos de producción; es decir, bajar algunos ítems que sean prescindibles de ser ajustados.
Para cortar esta dependencia, el especialista planteó una alianza pública-privada para buscar más mercados en el exterior y para diversificar el portafolio exportador del país.
Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) las exportaciones bolivianas a mayo del 2023 sumaron $us 4.575 millones, mientras que las importaciones totalizaron $us 4.741 millones, arrojando un saldo comercial deficitario de $us 166 millones. Hasta mayo, las exportaciones del país cayeron un 23% en términos de valor y un 20% en volumen, una doble preocupación.
Del total exportado, un 75% fue de productos tradicionales. Y un 25%, es decir, más de $us 1.134 millones de productos no tradicionales.
Fuente: El Deber