Un especialista en entomología de Colombia sugirió el control en base a esta herramienta que cuenta con cuatro pilares.

El monitoreo es importante para ver qué factor de control se debe utilizar. / Foto: Cropaia.com
La identificación de ninfas o adultos en un cultivo también es importante. / Foto: Canna.es

Edison Torrado, biólogo y magister en entomología de Colombia, dio una charla denominada “Ciclo de vida, comportamiento, ecología y manejo oportuno de trips” invitado por la Academia Rainbow Live.

Se trata de una plaga mayor para los productores que la padecen y tienen que luchar contra sus efectos negativos en diferentes cultivos y para su control se precisan herramientas efectivas.

Torrado propone un Manejo Integrado de Plagas (MIP) basado en cuatro pilares de rotación para que su aplicación tenga un efecto positivo en el campo.

La primera (Identificar la especie): los trips por su diversidad de especies son un problema grande en algunos cultivos y por eso el primer pilar es saber cual es el que se tiene en el campo Frankliniella occidentalis o Frankiniella panamensis.

Su control se puede hacer con dos hongos entomopatógenos sobre las dos especies y eso implica diferencias en su manejo.

“El monitoreo de trips es muy importante, si en el cultivo se encuentran solo adultos entonces surge la pregunta de si el trips llegó a la planta o nació en ella. Si llegó fue producto de una migración pero si nació quiere decir que la plaga ya está establecida y se va a encontrar huevos, adultos y ninfas”

El segundo (Biología de la plaga). Relacionado con su ciclo de vida, desde el embrión hasta el ciclo adulto, reproducción y alimentación y aspectos de supervivencia.

En este aspecto hay que ver cómo afecta la temperatura en el ciclo de vida de un insecto y sobre todo su fisiología, a menor temperatura los ciclos son más largos y a mayor temperatura los ciclos son más cortos, y esto tiene que ver con el cambio climático y el avance de las plagas.

En el caso de los trips se crian en ambientes confinados, a 15 grados el ciclo será de 40 días, si se sube 10 grados baja a 15 días, con 10 días más llega hasta 10 días. Esa es la importancia que tiene la temperatura.

El tercero (Monitoreo). El seguimiento de las poblaciones y la toma de decisiones tiene que ser correcta, en base a la población actual cuando se inicia el manejo de control y también el resultado del uso de una herramienta con la idea que la población no se incremente.

“El monitoreo de trips es muy importante, si en el cultivo se encuentran solo adultos entonces surge la pregunta de si el trips llegó a la planta o nació en ella. Si llegó fue producto de una migración pero si nació quiere decir que la plaga ya está establecida y se va a encontrar huevos, adultos y ninfas”, dijo Torrado.

En ese caso se sugiere la implementación de la presión de selección para usar las herramientas de control químico.

El cuarto (Herramientas de manejo). Esto tiene que ver con trampas, trampas de colores, el uso de control biológico como depredadores parasitoides y entomopatógenos, el uso de los insecticidas que tiene que ver con extractos botánicos, o control físico con algunos polímeros.

“Todas las herramientas de manejo están diseñadas sobre las propiedades dinámicas de las plagas, es todo lo que lleva a lo que fluctúe una población y lo que interesa es que sea bajo”, agregó el disertante.

Y cerró su exposición al mencionar que cuando en un cultivo hay poca población de trips pero luego hay un incremento, quiere decir que hay un desorden y lo que hay que ver es cómo se resta la población.

 

Fuente: Academia Rainbow Live
Redacción: Publiagro