Foto: Agritotal
La mayoría de las empresas de espectáculos cancelaron las fiestas de Año Nuevo y eso generó la disminución en la demanda de la carne de cerdo.
Los porcicultores de Santa Cruz recibieron como un golpe de gracia el conflicto social de fin de año, derivado de la aprehensión del gobernador Luis Fernando Camacho.
Esto generó que la mayoría de las empresas de espectáculos suspendan las fiestas de Año Nuevo, donde estaba garantizada la provisión y venta de carne de cerdo.
Henry Chávez, gerente de la Asociación Departamental de Porcicultores de Santa Cruz (Adepor), calificó este incidente como negativo para el sector, sumado a los paros que ocurrieron el 2022 que generaron pérdidas cuantiosas.
“La última semana de diciembre era clave para nosotros y la demanda se incrementó un poco, sin embargo sucedió esto (aprehensión del gobernador) y de repente cayeron los precios y no hubo la comercialización que esperábamos”
“La última semana de diciembre era clave para nosotros y la demanda se incrementó un poco, sin embargo sucedió esto (aprehensión del gobernador) y de repente cayeron los precios y no hubo la comercialización que esperábamos”, dijo Chávez.
Por otra parte, mencionó que existe la decisión de seguir con más fuerza en la producción y ser parte de la seguridad alimentaria de Bolivia, pese a los efectos adversos que tuvieron que afrontar los porcicultores el año pasado.
Actualmente, según el directivo, existe suficiente carne de cerdo para abastecer a la población durante el primer mes del 2023. Además existe la expectativa de que ello ocurra hasta el final de esta temporada.
Fuente: Publiagro