Claves para optimizar los costos de la alimentación de la ganadería

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Foto: BBC

¿Qué más se puede hacer para reducir aún más los costos de alimentación de los animales sin sacrificar la calidad de la alimentación?

Esa es la interrogante que se plantean numerosos productores pecuarios del planeta ante el marcado aumento de los precios de los insumos, la energía, el transporte, aspectos que son un dolor de cabeza para miles de ganaderos, especialmente.

Un interesante trabajo publicado en el portal de Mundo Agropecuario resalta el tema señalando que las enzimas exógenas se usan comúnmente como un nutriente clave para ahorrar costos de alimentación.

De igual forma, se busca optimizar la degradación y la disponibilidad de nutrientes, facilitando el uso de materias primas más baratas que antes se consideraban inadecuadas para cerdos y aves. 

La idea es que aunque la digestibilidad mejorada de los granos y las semillas oleaginosas da como resultado la liberación de más nutrientes en el tracto gastrointestinal de los animales esto no significa que también mejore su absorción. 

De igual manera, la absorción de micronutrientes está limitada por la capacidad de absorción del intestino, independientemente de la cantidad o calidad de los nutrientes disponibles. 

Resaltan que los residuos de alimentos no digeridos simplemente se excretarán del cuerpo, lo que puede conducir a un aumento de los desechos nitrogenados, aumentando el impacto ambiental de la producción de los animales. 

«Otro aspecto importante es que las enzimas no afectan la matriz grasa de la dieta. Las grasas y aceites vegetales o animales añadidos son uno de los ingredientes más caros en las dietas de los monogástricos y son indispensables como fuente primaria de energía», subrayan.

Alimentación de pollitos

Colocan un estudio de pollos de engorde de 9.000 días de edad realizado en la granja de un importante fabricante de piensos europeo evaluó el efecto de alimentar con una dieta estándar de maíz y soya frente a la misma dieta suplementada.

Durante la primera fase, se añadió un potenciador de la absorción de nutrientes para ayudar a los pollitos jóvenes a tener un mejor comienzo. 

Los resultados mostraron una mejora significativa en la ganancia de peso corporal en comparación con el control, manteniendo la misma eficiencia de alimentación que el tratamiento de control.

Fuente: Mundo Agropecuario

Redacción: Publiagro