Según una denuncia publicada en el portal de Red Uno los llamados interculturales dañaron los canales de riego y los animales murieron de sed. Igualmente, ingresan en horas de la madrugada a las propiedades con materiales de construcción para levantar viviendas apoderándose de los terrenos.
Personas que se declaran interculturales, aunque son conocidos como avasalladores de tierras, fueron denunciados por haber causado serios daños en una hacienda de una familia en las cercanías de la laguna la Angostura, Cochabamba, donde cerraron los canales de riego y al no llegar el agua a los bebederos murieron 22 vacas.
El hecho fue presentado a través de un audio en el portal del canal de televisión Red Uno, una acción que perjudica notablemente a los propietarios por el accionar de los presuntos agresores.
Ante esta situación son numerosos los productores pecuarios quienes se muestran indignados ante este atropello que perjudica notablemente la actividad ganadera y lechera de la región.
Las acciones vandálicas se han incrementado en los últimos tres meses a pesar de haber formulado las denuncias a las autoridades.
Denunciaron los afectados que en horas de la madrugada los avasalladores ingresan a los predios con materiales de construcción y proceden a construir sus viviendas.
Ya se pueden apreciar esas construcciones y hasta han construido calles dentro de las propiedades.
Por esta causa ya se apoderaron de esos terrenos y han cortado las acequias para impedir que el agua del río llegue a la propiedad.
Por ello los animales al no tener el vital líquido pierden la vida y con ello producen las pérdidas que ahora lamentan los propietarios.
Ante el temor de perder todo el ganado cuando los sacan a pastorear, los productores se han visto obligados a mantenerlos en confinamiento donde ingieren solo avena y pasto, pero aseguran que pierden muchos valores nutreicos.
Son muchas las vacas las que han muerto de inanición luego de parir a sus becerros. Los denunciantes reclamaron que por esta situación han perdido otros 12 ejemplares.
De igual forma, para evitar más pérdidas se vieron obligados a vender 16 vacas lecheras a otros productores que poseen forraje y los pueden mantener protegidos de las acciones vandálicas de los presuntos avasalladores.
Fuente: Red Uno