Su presidente William de las Muñecas considera que el concepto de la empresa es la producción de proteínas vegetales y bioenergía para la alimentación de los animales, especialmente.
«Sentimos una profunda emoción porque en Bolivia es una labor hacer empresas y me siento junto al equipo que me acompaña, muy contento de poder culminar una planta nueva para complementar el complejo industrial que hemos desarrollado en Pailón».
Así se expresó, William de las Muñecas, presidente ejecutivo de la Sociedad Granelera Granosol S.A. en entrevista con Publiagro durante el acto inaugural de la moderna planta extrusora de soya la cual permitirá alimentar un promedio de 25 mil animales diarios entre ganado bovino, pollos, cerdos y hasta peces.
¿Cuál es el concepto teórico de la planta?
«Granosol, como muchos saben, tiene una línea muy importante que es la producción de proteínas vegetales y bioenergía. Ese es el concepto de esta compañía.
En algún momento nos dijimos, ya no exportamos materias primas, vamos a exportar a vender valor agregado. De allí partió el concepto de poder hacer una economía circular, amigable con el medioambiente y empezamos la línea de producción de etanol a partir de los cereales.
La producción de etanol nos ha permitido producir productos que son altamente palatables y ricos para poder trabajar proteína animal y con el objetivo de complementar, la empresa decidió trabajar una planta de producción de harina de soya destinada a poder completar una dieta diaria que se le otorga a un animal vacuno, porcino o aviar.
Con esta planta podremos tener una ración completa, una ración económica y una ración altamente efectiva para el propósito que tenemos que son las proteínas y la bioenergía».
¿Por qué se le denomina planta exclusora de soya?
En el mercado boliviano todos estamos muy familiarizados con las harinas integrales de soya y las tortas solventes de soya, ambas buenas, por supuesto; sin embargo, la categoría que tenemos nosotros de una harina extrusada responde a un concepto de molienda que es netamente orgánico. Se trata de una molienda por fricción, la cual permite obtener una harina acabada que tendrá un alto nivel proteico y un alto nivel de energía.
Explicó que en una harina solvente no se tiene energía y la ventaja, en este caso, radica en que el expeler si la podrá tener como para poder suplir otros elementos que se utilizan en las dietas, ese es el concepto de expeler.
El segundo concepto de expeler es que tiene la ventaja o la bondad de que la proteína pasa directamente del rumen al intestino del animal generando una mayor capacidad de engorde diario.
¿Qué mensaje le ofrece a los productores de la zona?
«Granosol es una empresa que está comprometida con la provincia de Chiquitos o la Chiquitanía. En este momento, tenemos la suerte de recibir agricultores de toda la zona este de Santa Cruz. Acá en la empresa se compran granos de soya, maíz, sorgo, trigo a los productores de San José, Cuatro Cañadas, Pailón, San Julián y San Ignacio. En fín, la Chiquitanía está bien atendida con este centro de producción para poder transformar el grano en materia prima.
A los productores les digo que debemos persistir en la actividad empresarial. Para ello tenemos que tratar de consolidar más niveles tecnológicos de producción que nos permitan mejorar nuestros rendimientos y que todos ellos sean amigables con el medioambiente.
En ese sentido, afirmó que las industrias están haciendo lo mismo, pues tratan de entrar en la línea medioambiental con proyectos que no sean contaminantes, con bajo niveles de dióxido de carbono (C02) y que atiendan las necesidades de los agricultores, tanto los proveedores, como los usuarios de las materias primas que venden las empresas y que son los alimentos proteicos.
Fuente: Publiagro