Así lo manifiesta el veterinario René Condori, docente e investigador de la Umsa en la Estación Experimental Choquenaira donde se cumplen las diferentes etapas en la vida de los terneros.
El buen manejo de los terneros desde el momento de su nacimiento es un factor clave para su posterior desarrollo y eso es lo que se enseña en la Estación Experimental Choquenaira, de la Facultad de Agronomía de la Universidad Mayor de San Andrés (Umsa).
Un excelente trabajo publicado en el portal de Prisma Agropecuario presenta, por intermedio del veterinario René Condori, docente e investigador, las diferentes etapas del desarrollo de los terneros, una fase realmente motivadora para los estudiantes de la Umsa.
Comenzó por señalar que la gestación del ganado vacuno tiene una duración de nueve meses, unos 284 días promedio, aunque el nacimiento puede ocurrir cinco días antes.
«Generalmente los partos son fáciles y el ternero macho nace con 37 kilos promedio y las hembras con 35 Kgs. Los que están aquí en la estación son de la raza Holstein, aunque algunas veces hemos visto partos de machos con 50 kilos y hembras con 40 a 45 kgs», explica el especialista.
En su disertación señala además que una vez que nacen los terneros la vaca le hace la limpieza con su lengua, luego el personal de la estación le limpia el hocico y se le quitan las flemas que quedan.
Posteriormente, realizan el curado del ombligo con tintura de yodo, lo llevan a la balanza para ser pesado y se le suministra el esencial calostro. El animal se levanta a transitar a un promedio de 30 a 40 minutos luego de su nacimiento.
«Si no puede mamar nosotros ordeñamos la vaca y le suministramos entre un litro a litro y medio de calostro (leche) que es muy importante en los primeros días del ternero», subrayó.
Explicó que el calostro le sirve además al animal como un laxante que limpia todo el tracto digestivo y además le permite aumentar las defensas.
Después de eso los terneros son separados de la madre y llevados a los corralitos o jaulas separadas. Allí no consumen leche directamente de la madre por lo que se la dan en baldes, de acuerdo al peso que posean.
Con 37 kilos se les da el 10% de su peso, Sin embargo, para ser más precisos le suministran dos litros en la mañana y otros dos en la tarde por un período de tres meses.
Sin embargo, los terneros empiezan a los 35 días a comer alimentos balanceados, entre ellos heno de alfalfa.
«A los tres meses de vida llegan a tener un peso de cien kilos y es el momento del destete. Hasta esos cien días han consumido 400 litros de leche y eso genera una inversión de 1.200 bolivianos por cada ternero durante ese período de tiempo», precisó
Finalmente, ya el ternero sale al campo a completar su ciclo, En esa etapa, una vez al año realizan el rastreo de la brucelosis y tuberculosis. En caso de salir negativos de esas enfermedades no se les coloca vacunas.
Entre las medicinas que les dan están las vitaminas B, D con la finalidad de que se fortalezca y en el momento del destete se les desparasita y les suministran un complejo vitamínico.
Sin embargo, el especialista señala que en esta etapa los terneros pasan por fases muy criíicas por cuanto siempre aparecen diarreas, neumonías y también se presenta el llamado mal de altura, toda vez que la estación está ubicada a 3,879 msnm; no obstante, para cada una de esos problemas cuentan con los medicamentos y tratamientos adecuados.
Fuente: Prisma Agropecuario
Redacción: Publiagro
