El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) y los actores de la cadena productiva de castaña se reunieron en un conversatorio, que se llevó a cabo el miércoles, en la localidad de Riberalta, Beni.
“El Conversatorio, realizado en Riberalta, Beni, fue organizado por el PNUD y el Instituto IBCE, donde participaron casi 50 representantes públicos y privados, entre ellos dirigentes del sector castañero, productores, comercializadores, exportadores, entidades financieras e instituciones de apoyo al sector”, se lee en un boletín institucional.
En la oportunidad, el representante Adjunto del PNUD en Bolivia, Dennis Funes, explicó que esta entidad desarrolló el estudio “Mapeo de Oportunidades de Inversión Privada en el Sector Agroalimentario de Bolivia para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”.
“(Con ese estudio) se identificó sectores, productos, rubros potenciales que no solo generan rentabilidad para el país, sino también impacto social en materia ambiental. La castaña es parte del estudio, queremos que el conjunto de actores, tanto del sector público, privado y sociedad civil, logren identificar la problemática y fortalecer la producción sostenible” dijo.
Aseguró que el próximo año se planificará realizar una mesa de diálogo sobre la sostenibilidad de castaña, el manejo forestal y todos los temas sociales que están detrás de la cadena de valor, para el bienestar y rentabilidad para las comunidades.
El economista Gonzalo Vidaurre, encargado de conducir el conversatorio y sistematizar la información producida para compartirla desde el PNUD con las entidades gubernamentales, dijo que la castaña debe tratarse como un producto forestal y no agrícola.
La gerente general de la Cámara de Exportadores del Norte (Cadexnor), Elizabeth Sonnenschein, agradeció al IBCE y al PNUD por el interés en la cadena productiva de la castaña y exhortó a seguir trabajando para desarrollar este tipo de talleres que son beneficiosos para la región.
“La zafra 2021 – 2022 comienza en diciembre y este año será complicado. El conversatorio nos permite juntarnos con toda la cadena productiva y empezar a trabajar para encarar la nueva zafra”, dijo.
Algunas de las conclusiones a las que se llegó en el conversatorio son la necesidad de una política para fomentar la producción y tecnología en la cadena productiva de la castaña, este alimento debe tratarse como un producto forestal y no como un producto agrícola.
Fuente: ABI