El proyecto empezó a ejecutarse el año 2012 con la construcción de la infraestructura para la factoría, el 2014 se hicieron obras complementarias y el 2015 se realizó el equipamiento de la industria, todo significó más Bs 76 MM.
La procesadora de cítricos de Bermejo se volvió en un cuento de nunca acabar, cada vez faltan cosas por terminar. Se cumplirá una década del inicio del proyecto y esa factoría, que costó más de 76 millones de bolivianos, no industrializó ni una sola fruta en la ciudad triangulo del sur, mientras sus otros motores económicos, la caña y el comercio, decaen. Desde el Ejecutivo adelantan un análisis para ampliar la variedad de productos a industrializar.
El proyectó empezó a ejecutarse el año 2012 con la construcción de la infraestructura para la industria, que demandó alrededor de 15 millones de bolivianos, 13 para la obra y dos para la supervisión. El año 2015 se vino la inversión más significativa, 55,6 millones de bolivianos para el equipamiento. La industria no estaba lista para entrar en operación, porque demandó seis millones de bolivianos para servicios complementarios, además de unos 272 mil para la supervisión, según documentos publicados en el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes).
Con toda esa inversión la factoría aún no está lista para operar, Tito Gareca, asambleísta departamental por la provincia Arce, explicó que todavía se estima que debe existir una inversión de 10 millones de bolivianos, con la finalidad de llevar la red servicios básicos hacia la industria que está emplazada en la comunidad de El Nueve de Bermejo. Con ello, recién la factoría estaría en condiciones de empezar su funcionamiento.
En ese sentido, el legislador dice que eso dependerá de un plan que debe armarse junto a las organizaciones sociales, para pedirle al Oscar Montes, gobernador de Tarija, que coloque esos diez millones de bolivianos que faltan.
“Primero hay que terminarla, si eso no sucede no se puede hablar de una administración. Hay mucha gente que cambió la producción de caña por cítricos. El mayor problema para el sector del agro es el mercado, por ejemplo, se produce caña, pero el ingenio azucarero no la procesa toda – comentó Gareca –. Entonces, si se produce cítricos hay que ver dónde llevarlos para la venta.
Muchos están esperando que primero funcione la planta para cambiar sus cultivos. Si todos se dedicarían al cítrico y no hay un mercado, no conviene ni cosechar la fruta porque el precio bajará debido a la mayor oferta”.
Franz Gutiérrez, Subgobernador de Bermejo, explicó que la situación de la planta de cítricos es preocupante. La intención es ponerla en marcha, pero se requerirá de capitales privados, porque el costo de funcionamiento es elevado.
Al margen del aspecto económico, el funcionario dice que la producción de cítricos que hay en ese municipio solo alcanza para que la industria trabaje dos semanas, y la pregunta es qué se hará con la factoría el resto del año. Entonces, se debe trabajar sobre la materia prima. Una de las alternativas es que no solo pueda procesar cítricos, sino también otros productos, como tomate.
“Vamos a sentarnos con el gobernador Oscar Montes para ver qué acciones vamos a tomar, tal vez ampliarla para que no solo sea una procesadora de cítricos, sino ampliara para otras cosas, como tomates para kétchup, o ver qué modificaciones se pueden hacer a la industria”, finalizó Gutiérrez.
Inversión
Desde la Subgobernación de Bermejo adelantan que el funcionamiento de la planta de cítricos requerirá de inversión privada.
Fuente: El País
