Por silencio administrativo en la Asamblea, la Gobernación dará curso a una asignación de Bs 6 millones.


Una serie de granizadas afectó en las últimas semanas a más de un centenar de familias en 11 municipios de Chuquisaca. Para atender a los damnificados por los desastres naturales en general, la Gobernación tiene previsto aprobar una millonaria modificación presupuestaria.
En septiembre y lo que va de octubre, las granizadas golpearon a familias de Las Carreras, Incahuasi, Yamparáez, Poroma, Azurduy, Yotala, Icla, Alcalá, Sopachuy, Tomina y Villa Serrano, que perdieron principalmente sembradíos y ganado.
Preliminarmente se conoce que hay más de un centenar de familias afectadas, según información compartida por el secretario general de la Gobernación, Ricardo Zarate.
MÁS AFECTADOS
Uno de los municipios con más perdidas es Poroma; el 9 de octubre soportó una granizada que afectó a 38 familias en la comunidad de Luje y el domingo 11 una riada causó daños en tres familias en la Pomamaza.
El 22 de septiembre y el 15 de octubre, dos granizadas caídas en las comunidades de Esquisma y Concepción, de Yamparáez, dejaron 39 familias damnificadas. El 18 de octubre, un evento similar en Huanca Pampa, Alcalá, afectó a 15 familias y castigó a diez hectáreas de sembradíos.
El día de las elecciones generales, otra granizada se ensañó con pobladores de Sipicani, Sopachuy, que reportaron la pérdida de chanchos, gallinas y cabras. Ayer, lunes, Tomina y Serrano informaron que un fenómeno similar también dejó daños que aún están en evaluación.


Los participantes en el evento también abordaron el problema de la mala nutrición y la inseguridad alimentaria. «No podemos seguir coexistiendo con el hambre, el sobrepeso y la desnutrición crónica infantil. No sólo porque es una injusticia sino porque no podemos darnos ese lujo», recalcó la vicepresidenta de Ecuador, María Alejandra Muñoz.
Países como Bolivia demostraron en esta etapa de pandemia que aún se cuenta con una gran producción de alimentos sanos y sostenibles gracias al sistema de agricultura familiar campesina e indígena.
Mercados y supermercados estuvieron abastecidos por estos productos durante la etapa de confinamiento, pero pese a ello, es un sector que aún no es valorado como debería por las autoridades.
Fuente: Correo del sur

