



El presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Klaus Frerking, expresó su preocupación por el creciente deterioro de la economía nacional y su impacto directo en la producción agropecuaria del país. En declaraciones recientes, se refirió al aumento del precio del dólar paralelo, que ha alcanzado los 18 bolivianos, como un síntoma grave de la desconfianza económica que atraviesa Bolivia.
“La inflación continúa, la devaluación continúa, las calles hablan, la población sufre y Bolivia lo siente”, afirmó Frerking, subrayando el malestar generalizado en distintos sectores productivos y sociales.
El líder del sector agropecuario fue enfático al señalar que este escenario está encareciendo todos los procesos de producción.
“Los insumos siguen subiendo, las transferencias bancarias siguen subiendo y los costos de producción van a seguir subiendo”, indicó.
Frerking también apuntó directamente a las autoridades económicas del país, a quienes responsabilizó por la falta de acciones eficaces para contener la crisis.


“El precio de la carne no va a bajar mientras la inflación continúe, los costos de producción no bajen y no se controle el contrabando”


“Hay sectores que están en franjas de precios, sectores con restricciones, sectores con resoluciones biministeriales… ¿y quién va a subvencionar a esos sectores? Emapa no subvenciona más del 10% a todos los productores a nivel nacional. Pedimos que dejen que el mercado funcione”, reclamó.
En relación con el precio de la carne, Frerking fue claro en afirmar que no existe posibilidad de una baja mientras persistan los problemas estructurales que afectan al país.
“El precio de la carne no va a bajar mientras la inflación continúe, los costos de producción no bajen y no se controle el contrabando”, aseguró.
Finalmente, recordó que el sector agropecuario no es el que fija los precios, sino que estos son el resultado de múltiples factores externos que escapan a su control.
“Nosotros no ponemos precio, el precio lo pone el mercado, lo pone la situación del país, lo pone la inflación, la falta de combustible, la falta de seguridad jurídica, lo pone el contrabando. Nuestra tarea es producir alimento y comida para los bolivianos, y eso es lo que hacemos”, concluyó.


Fuente: Klaus Frerking
Redacción: Publiagro