



La Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) realizó la presentación oficial de los resultados del Programa de Nutrición de Cultivos, un esfuerzo técnico y científico que durante 10 campañas consecutivas ha generado valiosas recomendaciones de fertilización balanceada para los principales cultivos del departamento de Santa Cruz, considerando las diversas zonas productivas y las particularidades de sus suelos.
Esta iniciativa forma parte del eje de sostenibilidad que impulsa ANAPO, el cual promueve un enfoque integral de producción basado en la siembra directa, la rotación de cultivos y el uso de cultivos de cobertura, prácticas que, combinadas con una nutrición adecuada, buscan aumentar la productividad de forma responsable y sustentable, cuidando tanto el suelo como el medio ambiente.
“El tema de fertilización es muy importante. Nosotros como ANAPO tenemos seis extensionistas que se encargan de implementar los ensayos. Son ensayos permanentes, inmóviles, que venimos trabajando desde la campaña 2019”, explicó el equipo técnico de la institución. A la fecha, se han implementado cerca de 100 ensayos en distintas regiones: zonas integradas, zona este y la Chiquitania.
Durante la presentación, los especialistas argentinos Fernando García y Nahuel Reussi, ambos reconocidos referentes en nutrición de cultivos, expusieron los hallazgos del programa y profundizaron en la importancia de una correcta fertilización.
Fernando García, docente en la Universidad Nacional de Balcarce y referente internacional en nutrición balanceada, destacó que “lo que se quiere es reducir la brecha entre el rendimiento que se está logrando y el que se podría llegar a alcanzar. Esa brecha puede deberse a malezas, plagas, condiciones del suelo y también, en gran medida, a la nutrición”.


“El tema de fertilización es muy importante. Nosotros como ANAPO tenemos seis extensionistas que se encargan de implementar los ensayos. Son ensayos permanentes, inmóviles, que venimos trabajando desde la campaña 2019”


Añadió que “a nivel mundial, se reconoce que la nutrición es el limitante más importante que hay para esa brecha entre lo que se está logrando y lo que se puede alcanzar. La nutrición y la enfermedad del suelo son factores que juegan dentro de un sistema de producción donde interactúan muchos elementos: condiciones climáticas, genética, manejo del ambiente, fecha de siembra, manejo de coberturas, siembra directa y control de plagas. Todos estos factores influyen en la eficiencia productiva”.
En este marco, los especialistas subrayaron cuatro pilares esenciales para el manejo del suelo: rotación de cultivos, siembra directa, cultivos de cobertura y nutrición adecuada. Estos elementos, correctamente combinados, forman la base de un modelo agrícola más resiliente y productivo.
Respecto a los resultados obtenidos, el programa ha demostrado que la fertilización balanceada puede incrementar significativamente los rendimientos. En base a 88 experimentos realizados a lo largo de 10 campañas, se obtuvieron aumentos promedio del 20% en maíz, 21% en trigo, 14% en soya y 26% en girasol.
Con estos datos, ANAPO reafirma su compromiso con los productores, ofreciendo herramientas técnicas que no solo elevan la rentabilidad, sino que también apuntan a la conservación del recurso suelo, clave para la sostenibilidad del agro boliviano.
Fuente: ANAPO
Redacción: Publiagro

