La planificación nutricional para bovinos de corte es un aspecto clave en la ganadería, ya que influye directamente en la productividad, la salud animal y la rentabilidad del sistema. Esta planificación debe considerar tres elementos fundamentales: el tipo de alimento, la cantidad y los nutrientes que requiere el animal en cada etapa de su desarrollo.
En la actualidad, con la llegada de la época de lluvias, muchas regiones ganaderas experimentan una bonanza forrajera que se traduce en una mayor disponibilidad de pastos y forrajes. Sin embargo, esta abundancia no siempre se maneja adecuadamente, lo que puede llevar a un desperdicio de recursos y a una disminución de la eficiencia en la producción ganadera.
Franz Rodríguez, asesor nutricionista, señala que, ante la existencia de excedentes forrajeros, es fundamental implementar estrategias de conservación para garantizar la alimentación del ganado durante la época seca.
“Si hay excedente, es propicio hacer reservas forrajeras para la época seca y, en ese período, realizar un buen manejo de las reservas. Además, es importante complementar los nutrientes que puedan faltar en los forrajes de reserva y conocer los objetivos nutricionales de cada categoría animal, tanto en cría como en recría, así como los indicadores que deben alcanzarse”, explicó.
Rodríguez resalta que la nutrición en bovinos de carne debe incluir estrategias de suplementación adecuadas para cada fase del año y cada categoría animal. Esto implica el uso de suplementos para vacas en producción, la suplementación con rollos de heno y la determinación de las cantidades adecuadas de silo y minerales, tanto en la época de lluvias como en la época seca.
“Hay que comenzar a intensificar el tema de producción ganadera, me refiero a que hay que cortar los ciclos de producción, y ahí es donde entra la suplementación estratégica”, destacó el especialista. Tradicionalmente, la suplementación en ganado de carne se limitaba al uso de sal mineral, pero en la actualidad existen opciones más avanzadas, como la suplementación energética para diferentes épocas del año.
“Ahora ya hay suplementación energética para aguas y para secas, con el fin de elevar las ganancias de peso y acortar los ciclos de producción. De esta manera, podemos aumentar la producción de animales por hectárea, obtener más kilos por hectárea y, por ende, lograr una mayor rentabilidad”, agregó Rodríguez.
«Hay muchos métodos para evaluar la disponibilidad forrajera en un área de pastoreo. Se pueden aplicar técnicas de muestreo en campo, monitoreo satelital o uso de drones. También es posible realizar evaluaciones caminando por los potreros para identificar zonas degradadas, áreas calvas o con maleza. Lo importante es conocer el aporte forrajero real del sistema productivo”
Determinación de la cantidad de alimento
Uno de los aspectos fundamentales en la planificación nutricional es establecer la cantidad de alimento que necesita el ganado, lo que, en términos generales, se refiere a la disponibilidad de forraje en los potreros. Rodríguez explica que existen diversos mecanismos para determinar esta disponibilidad de manera precisa.
“Hay muchos métodos para evaluar la disponibilidad forrajera en un área de pastoreo. Se pueden aplicar técnicas de muestreo en campo, monitoreo satelital o uso de drones. También es posible realizar evaluaciones caminando por los potreros para identificar zonas degradadas, áreas calvas o con maleza. Lo importante es conocer el aporte forrajero real del sistema productivo”, señaló.
Asimismo, para determinar la carga animal adecuada, es esencial medir la oferta forrajera en función del requerimiento de los bovinos. “Hay muchas formas de hacer el muestreo para determinar la cantidad de forraje que se tiene en el área y definir correctamente la carga animal”, concluyó Rodríguez.
Importancia de una buena planificación nutricional
Una planificación nutricional adecuada no solo permite optimizar el aprovechamiento de los recursos forrajeros, sino que también impacta directamente en la eficiencia reproductiva del hato, el crecimiento de los animales y la rentabilidad del sistema ganadero. Implementar reservas forrajeras estratégicas, equilibrar la dieta con suplementos adecuados y ajustar la carga animal a la disponibilidad real de alimento son prácticas clave para mejorar la producción de carne de manera sostenible.
Además, la adopción de tecnologías como el monitoreo satelital, el uso de drones y el análisis de calidad del forraje puede proporcionar información valiosa para la toma de decisiones en la gestión ganadera. Con una correcta planificación y manejo de la nutrición, los productores pueden garantizar una mejor productividad y resiliencia ante los cambios estacionales.
Fuente: Franz Rodríguez
Redacción: Publiagro
