Los ganaderos del Beni están enfrentando una crisis severa debido a las constantes inundaciones que han anegado vastas extensiones de tierra, dejando sin pastura a miles de reses. Las intensas lluvias y el desborde de los ríos como el Maniquí y el Yacuma han forzado a los productores pecuarios a trasladar su ganado a zonas más altas, generando un estrés significativo en los animales, lo que afecta su peso y los vuelve más vulnerables a enfermedades.

Marcelo Jesús Simón Pinto, presidente de la Asociación de Ganaderos de San Borja, expresó su preocupación, señalando que el exceso de agua no solo afecta la infraestructura de las propiedades, sino que está provocando la muerte de ganado debido a la falta de alimento. «El ganado no encuentra pastura y, en muchos casos, muere por inanición más que por las inundaciones en sí», explicó.

En localidades como San Cristóbal y Peñita de Río Negro, las propiedades llevan más de 20 días inundadas, lo que ha agravado la crisis humanitaria y productiva en la región. Edwin Balcázar, un ganadero de Santa Rosa, indicó que ya ha tenido que evacuar 1.100 cabezas de ganado a terrenos más elevados. Sin embargo, uno de los problemas más graves es la falta de pastura en las zonas altas, lo que deriva en la pérdida de peso del ganado y aumenta la mortalidad.

“Los ganaderos del Beni sufren grandes pérdidas económicas debido a las inundaciones y la falta de pastura para su ganado, mientras que en Santa Cruz los cultivos de soya y sorgo también se ven severamente afectados por el exceso de agua.”

«El pasto está bajo el agua y, cuando finalmente se retira, queda podrido. Conseguir pastura fresca es esencial para mantener el peso del ganado», explicó Balcázar, quien resaltó la magnitud de la crisis que se extiende a diferentes provincias del Beni. El desborde de los ríos ha afectado a comunidades enteras, con cultivos arruinados y animales sufriendo las consecuencias de la falta de alimento.

Además de las pérdidas económicas por la muerte del ganado, los ganaderos enfrentan un desafío adicional: el precio de la carne. A pesar de que las inundaciones están afectando gravemente la producción, los ganaderos aclararon que no son ellos quienes determinan el precio final del producto en los mercados. Balcázar indicó que, mientras a ellos se les paga entre Bs 26 y Bs 32 por kilo gancho, en los mercados de Trinidad el costo del producto supera los Bs 40, lo que demuestra que son los intermediarios quienes definen el precio al consumidor.

Problemas en Santa Cruz

El panorama no es mucho mejor en Santa Cruz, donde las fuertes lluvias están causando inundaciones en áreas productivas del norte integrado, afectando cultivos de soya y sorgo. Al inicio del mes, se reportaban 2.800 hectáreas bajo el agua, pero esta cifra ha ido en aumento, según los productores, quienes afirman que el agua sigue expandiendo los daños en los cultivos.

Fuente: el Deber
Redaccion: Publiagro