Los bonos de carbono son instrumentos financieros que representan una tonelada métrica de dióxido de carbono (CO₂) o su equivalente en otros gases de efecto invernadero, los cuales han sido evitados, reducidos o eliminados de la atmósfera a través de diversas iniciativas.

Estos bonos se generan mediante proyectos enfocados en la reducción de emisiones, la captura de carbono o la adopción de prácticas sostenibles, y pueden comercializarse en mercados de carbono, tanto regulados como voluntarios.

En Santa Cruz, recientemente se llevó a cabo el Master Minds Deep Dive Forum sobre Bonos de Carbono, un evento clave en el que se abordó la relevancia de estos instrumentos financieros para el sector agropecuario y la necesidad de adoptar políticas ambientales responsables.

Durante el foro, el experto y consultor Sergio Arispe destacó la creciente atención internacional sobre Bolivia en temas medioambientales. Sin embargo, en lugar de ser un reconocimiento positivo, esta mirada global está marcada por una profunda preocupación debido a los efectos adversos de la deforestación, los incendios forestales y la falta de una gestión sostenible del medio ambiente.

En su intervención, Arispe enfatizó la importancia de que el sector agropecuario se adapte a esta nueva realidad y comprenda la urgencia de implementar estrategias sostenibles.

«Con este evento estamos tratando de motivar que el sector agropecuario pueda, ojalá, adaptarse a esta nueva realidad, una realidad que nos obliga a proteger las inversiones, pero también a resguardar los mercados futuros y que estos sean un legado para nuestros hijos», señaló el especialista.

“Amar la naturaleza no significa no generar riqueza»

El foro contó con la participación de productores agropecuarios, investigadores y profesionales en ingeniería agronómica. Además, se realizó una mesa de debate en la que intervinieron destacadas figuras del ámbito productivo, entre ellas, el presidente de CREA Bolivia, un representante de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y el presidente de Fegasacruz, junto con otras autoridades vinculadas al sector pecuario y agrícola.

Durante el evento, Sergio Arispe hizo un llamado a los productores a no perder de vista el valor fundamental de la tierra como fuente de producción y rentabilidad. Resaltó que el sector agropecuario tiene un enorme potencial para involucrarse en los mercados de carbono, siempre que adopte prácticas sostenibles que contribuyan a mitigar el impacto del cambio climático.

Participar en estos mercados no solo permitiría a los productores diversificar sus ingresos mediante la comercialización de bonos de carbono generados por prácticas sostenibles, sino que también traería beneficios a largo plazo. Entre ellos, la mejora de la salud del suelo, el aumento de la resiliencia de los sistemas productivos y el fortalecimiento de la sostenibilidad en el tiempo.

Para cerrar su participación, Arispe dejó una reflexión que invita a una mayor conciencia ambiental y responsabilidad en la gestión de los recursos naturales: «Amar la naturaleza no significa no generar riqueza».

Fuente: Sergio Arispe
Redacción: Publiagro