Luego de más de una hora de reunión entre la Cámara Nacional de Oleaginosas (CANIOB) y el Gobierno, se determinó que se mantendrá la suspensión de las exportaciones de aceite hasta que la situación del producto en los mercados internos se normalice. El presidente de la CANIOB, Jorge Amantegui, destacó que, a pesar de esta medida, el despacho de aceite continúa con normalidad. Sin embargo, subrayó que existe un desvío significativo de producto hacia el contrabando.

«Hemos comprobado que el contrabando de aceite que llega de Santa Cruz hacia La Paz y otras regiones se va en grandes cantidades a través de Desaguadero. En los últimos dos días hemos demostrado que hay abastecimiento, que el aceite está llegando a todos los mercados», explicó Amantegui.

El presidente de la CANIOB también señaló que la distribución de aceite fue afectada en noviembre debido a varios factores, incluyendo bloqueos y la escasez de diésel, pero que en diciembre la situación se ha normalizado completamente. A pesar de esto, indicó que el Gobierno sigue esperando pruebas adicionales para verificar que el aceite esté disponible en los mercados de La Paz.

«El Gobierno afirma que, como no se ve el aceite en La Paz, van a esperar para verificar que esté disponible en los mercados. Pero cuando el aceite llega a los mercados, la gente lo compra en grandes cantidades, y mucho de eso está siendo desviado a Desaguadero. Eso es algo que debe verificarse»

«El Gobierno afirma que, como no se ve el aceite en La Paz, van a esperar para verificar que esté disponible en los mercados. Pero cuando el aceite llega a los mercados, la gente lo compra en grandes cantidades, y mucho de eso está siendo desviado a Desaguadero. Eso es algo que debe verificarse», agregó.

Amantegui también resaltó las consecuencias negativas de no suspender el veto a las exportaciones, advirtiendo que esto afectará las finanzas de las industrias y la economía en general. «El perjuicio de no suspender el veto es grande, porque no ingresarán divisas al país, y las industrias no podrán exportar ni siquiera harina», explicó. Además, destacó que sin los recursos necesarios, las industrias no podrán comprar soya, lo que tendrá un impacto directo en la producción de alimentos como pollo, cerdo y productos lácteos.

«Si no compramos soya, no habrá alimento para los pollos, para los cerdos, para los lecheros. A partir de enero, prepárense porque habrá escasez no solo de aceite, sino también de pollo y cerdo en este país», advirtió.

Finalmente, Amantegui expresó que no habrá más reuniones con el Gobierno hasta que se analice la situación y se tomen decisiones sobre posibles medidas a seguir. «Por ahora nos han comunicado que no se suspende el veto a las exportaciones», concluyó.

Fuente: Jorge Amantegui
Redacción: Publiagro