Los agricultores alertan sobre la reducción de la superficie sembrada a 50 mil hectáreas, ante la insuficiencia del combustible y la imposibilidad de acceder a agroquímicos

Foto: David Pérez
Foto: David Pérez
Foto: David Pérez

Los productores de arroz en Beni se encuentran en estado de emergencia debido a la escasez de diésel, un insumo fundamental para las labores agrícolas. Aunque el combustible está disponible en los surtidores, no es suficiente para cubrir la demanda necesaria en el campo. David Pérez, presidente de la Asociación de Productores de Arroz en Beni (ADEPAB), expresó su preocupación, ya que varios agricultores han comenzado a preparar el suelo para la campaña de siembra de verano, aprovechando las recientes lluvias en la región.

“Los productores llevan una semana haciendo filas en los surtidores para comprar diésel. Hemos venido trabajando de a poco, preparando el terreno para la siembra, pero ha llegado un momento en que el combustible no abastece lo suficiente. Estamos aprovechando las lluvias, pero una vez comience a llover de forma constante, ya no vamos a poder sembrar”, afirmó Pérez.

“Los productores llevan una semana haciendo filas en los surtidores para comprar diésel. Hemos venido trabajando de a poco, preparando el terreno para la siembra, pero ha llegado un momento en que el combustible no abastece lo suficiente. Estamos aprovechando las lluvias, pero una vez comience a llover de forma constante, ya no vamos a poder sembrar”

El diésel es esencial para el movimiento de las máquinas agrícolas, y su falta, sumada a la ausencia de créditos para la compra de agroquímicos, ha puesto al sector en una situación crítica. Las empresas distribuidoras ya no están ofreciendo créditos a los productores de arroz, lo que ha intensificado la emergencia en una región que produce cerca del 70% del arroz a nivel nacional.

“Ese crédito era un ítem clave que tenían todos los productores para cada siembra en las casas de insumos agroquímicos. Esta situación nos complica mucho, porque ese crédito nos salvaba, y hoy ya no lo tenemos”, agregó Pérez.

El líder gremial destacó que, aunque los cuatro surtidores de combustible en el Beni siguen operando, la extensión productiva ha crecido considerablemente, lo que requiere un aumento en la distribución de diésel para los productores. El Beni, como la mayor zona de producción de arroz del país, tenía planeado sembrar 70 mil hectáreas para la presente campaña. Sin embargo, ante estos problemas, Pérez señaló que el área se reducirá a 50 mil hectáreas.

“De la cantidad de combustible que se distribuye en los surtidores, el 50% es destinado a los productores. Es decir, si cada surtidor recibe 24 mil litros al día, 12 mil litros deberían ir a los productores. Sin embargo, esa cantidad no es suficiente, por lo que pedimos que se nos aumente en 10 mil litros más, al menos durante esta época de siembra”, reclamó Pérez.

El sector espera que se tomen medidas urgentes para solucionar la falta de combustible y permitir que los productores puedan continuar con sus labores agrícolas, evitando así una reducción drástica en la producción de arroz en la región.

 

Fuente: David Pérez 

Redacción: Publiagro